Seis hombres fueron detenidos acusados de integrar una banda que robó al menos cien identidades de personas para abrir cuentas bancarias, sacar tarjetas de créditos y generar empresas "fantasmas", con lo que se cometió una millonaria estafa. Muchas de las víctimas aún no se enteraron que su nombre fue utilizado para estos delitos y lo harán cuando la Justicia Federal las cite para que expliquen su situación.
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Seis hombres fueron detenidos acusados de integrar una banda que robó al menos cien identidades de personas para abrir cuentas bancarias, sacar tarjetas de créditos y generar empresas "fantasmas", con lo que se cometió una millonaria estafa. Muchas de las víctimas aún no se enteraron que su nombre fue utilizado para estos delitos y lo harán cuando la Justicia Federal las cite para que expliquen su situación.
Las detenciones de los sospechosos, cuyas identidades no se difundieron porque la investigación sigue en curso, fueron concretadas por efectivos de la División Delitos Complejos de la Policía de la Ciudad, por orden del Juzgado Federal 12 a cargo de Sergio Torres, y con intervención de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip).
Las fuentes precisaron que las pesquisas comenzaron a raíz de que un hombre que ni siquiera contaba con tarjeta de crédito denunció que alguien había adquirido varios electrodomésticos a su nombre.
El comisario Fernando Culshaw, jefe de la División Delitos Complejos de la Policía de la Ciudad, dijo que tras esa denuncia empezaron a "avanzar más allá de la estafa para tratar de ver cuántas personas estaban detrás de esto".
Según las fuentes, a medida que avanzó la investigación, la Justicia comenzó a enlazar distintos nombres que conformaban la red delictiva, cuyo "modus operandi" era mucho mayor que una simple estafa de copiar la banda magnética de una tarjeta de crédito.
Identidades falsas
En ese sentido, los investigadores establecieron que la organización compraba los datos de personas reales a las que les habían robado su documentación o que la habían perdido. Una vez obtenida la documentación de las personas, la banda utilizaba personas humildes conocidas en la jerga como "presta nombres o presta caras" que se hacían pasar por los titulares de los documentos.
"Las maniobras eran también distintas, en principio la identidad usurpada siempre estaba presente, luego empezamos a ver que había maniobras de lavado de activos, conformación de empresas con identidades usurpadas que comenzaban a dar cobertura a otras empresas para evasiones impositivas y le dimos intervención a la Afip", precisó el comisario Culshaw.
Tras ocho meses de investigaciones, se realizaron diez allanamientos, cinco en Capital Federal y cinco en provincia de Buenos Aires, que culminaron con la detención de seis sospechosos, entre ellos el presunto líder de la organización, todos con altos estándares de vida, ya que vivían en barrios privados del Conurbano. Los pesquisas comprobaron que estos hombres, mayores de 40 años, tenían varios antecedentes penales por delitos de "defraudaciones y estafas".
Además, durante los procedimientos, secuestraron 15 vehículos de alta gama. "Todos los detenidos tienen una participación activa y protagónica, tenemos al principal operador de esta asociación ilícita. Esta es la primer etapa, ahora iremos por el resto de la organización", afirmó Culshaw.
Las investigaciones continuarán por todo el país, ya que se sospecha de la existencia de más miembros de esta banda de estafadores.