"Mientras no seamos atendidos por el Gobierno a alto nivel, el vicepresidente Álvaro García Linera o Evo Morales, vamos a seguir en pie de lucha. A partir del miércoles ( por hoy) empieza el paro de 72 horas", dijo a los medios el máximo dirigente de la entidad, el minero Guido Mitma. Agregó que se ha instruido a las centrales obreras regionales que "organicen y planifiquen los métodos de lucha en los nueve departamentos" bolivianos.
La COB cumplió la semana pasada huelgas de 24 y 48 horas que tuvieron un escaso seguimiento y también encabezó manifestaciones en varias ciudades.
Por su parte, el presidente Morales sostuvo en radio Atipiri de la ciudad de El Alto, que "es su derecho, pero es un paro ilegal que no se justifica, qué demanda (hay) de carácter nacional, estructural, además no hay paro", agregó.
El mandatario manifestó que el conflicto por el que optó la dirigencia cobista tiene que ver con 180 trabajadores que aún no cobraron su finiquito (indemnización), porque más de 800 exempleados de la textil ya lo hicieron y aseveró que por ese número no se puede paralizar el país.
"¿Por 180 trabajadores vamos a parar el país?, ese tema lo resolvemos, me ofrecí, hay que crear una comisión social, les damos casa, a algunos les falta un año para jubilarse, hagamos por un año que trabajen en otra empresa", enfatizó.
El jefe de Estado cuestionó el "doble discurso" de algunos dirigentes de la COB, organización sindical que -dijo- es llevada por los militantes del Partido Obrero Revolucionario (POR) y de la derecha a un total "desprestigio".
Con sus protestas, la entidad sindical exige al Gobierno la anulación de un decreto que dispuso a mediados de mayo pasado el cierre de la estatal Enatex. El Ejecutivo boliviano creó Enatex en 2012 sobre la base de la empresa privada Ametex, cuya crisis se agravó en 2008 cuando Estados Unidos canceló a Bolivia el beneficio de unas preferencias arancelarias concedidas a países andinos.
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"Mientras no seamos atendidos por el Gobierno a alto nivel, el vicepresidente Álvaro García Linera o Evo Morales, vamos a seguir en pie de lucha. A partir del miércoles ( por hoy) empieza el paro de 72 horas", dijo a los medios el máximo dirigente de la entidad, el minero Guido Mitma. Agregó que se ha instruido a las centrales obreras regionales que "organicen y planifiquen los métodos de lucha en los nueve departamentos" bolivianos.
La COB cumplió la semana pasada huelgas de 24 y 48 horas que tuvieron un escaso seguimiento y también encabezó manifestaciones en varias ciudades.
Por su parte, el presidente Morales sostuvo en radio Atipiri de la ciudad de El Alto, que "es su derecho, pero es un paro ilegal que no se justifica, qué demanda (hay) de carácter nacional, estructural, además no hay paro", agregó.
El mandatario manifestó que el conflicto por el que optó la dirigencia cobista tiene que ver con 180 trabajadores que aún no cobraron su finiquito (indemnización), porque más de 800 exempleados de la textil ya lo hicieron y aseveró que por ese número no se puede paralizar el país.
"¿Por 180 trabajadores vamos a parar el país?, ese tema lo resolvemos, me ofrecí, hay que crear una comisión social, les damos casa, a algunos les falta un año para jubilarse, hagamos por un año que trabajen en otra empresa", enfatizó.
El jefe de Estado cuestionó el "doble discurso" de algunos dirigentes de la COB, organización sindical que -dijo- es llevada por los militantes del Partido Obrero Revolucionario (POR) y de la derecha a un total "desprestigio".
Con sus protestas, la entidad sindical exige al Gobierno la anulación de un decreto que dispuso a mediados de mayo pasado el cierre de la estatal Enatex. El Ejecutivo boliviano creó Enatex en 2012 sobre la base de la empresa privada Ametex, cuya crisis se agravó en 2008 cuando Estados Unidos canceló a Bolivia el beneficio de unas preferencias arancelarias concedidas a países andinos.