El Ministerio de Seguridad bonaerense separó de la filas de la Policía provincial a un teniente que provocó la muerte de una mujer y una nena de cuatro años cuando manejaba, de contramano y alcoholizado, por el Camino del Buen Ayre, a la altura del partido de Hurlingham.
El luctuoso hecho, que se conoció ayer, se produjo el domingo último a la madrugada en la mano hacia el norte de esa autopista, a la altura de Martín Fierro, en la zona oeste del Conurbano.
En ese lugar y en circunstancias que se investigan, el conductor del utilitario Peugeot Partner, el teniente Gastón Alcaraz, tras ingresar a la autopista de contramano y circular a alta velocidad, chocó de frente contra un automóvil Honda City en el que circulaba un matrimonio con sus dos hijos pequeños.
Producto del terrible impacto, el utilitario se elevó y terminó en la mano contraria tras saltar sobre el guard-rail.
Por el siniestro se produjo de inmediato la muerte de la mujer, mientras que la pequeña fue trasladada al Hospital Posadas, de Haedo, donde murió a poco de llegar.
En tanto, el esposo de la mujer fallecida -de 35 años y quien había perdido a un hermano en la tragedia de República de Cromañón- terminó internado en estado de shock, aunque fuera de peligro, al igual que el otro hijo de la pareja, de 7 años.
El teniente fue puesto a disposición de la Justicia y quedó desafectado del servicio ayer lunes, indicaron fuentes policiales a NA.
Según trascendió en forma extraoficial, el teniente Alcaraz en principio admitió que había tomado alcohol luego de haber discutido con su esposa, aunque después se negó a declarar ante el fiscal que instruye el caso.
La causa fue caratulada en principio como "doble homicidio simple", que contempla penas que van de los 8 a los 25 años de prisión.
El oficial, que se desempeñaba en el Comando de Prevención Comunitaria de San Martín, fue desafectado de la Policía por decisión de la Dirección de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad provincial, informaron fuentes de la cartera.
Tremendo dolor
La suegra y abuela de las víctimas mortales, María Rosa, aseguró sentir un "dolor tremendo" y dijo que a su familia la "arruinó" un "loco que venía en una camioneta" y se lamentó por haber sufrido una nueva tragedia, ya que uno de sus hijos, Juan Lanatta (20), fue una de las 194 víctimas del incendio en el boliche Cromañón.
El Ministerio de Seguridad bonaerense separó de la filas de la Policía provincial a un teniente que provocó la muerte de una mujer y una nena de cuatro años cuando manejaba, de contramano y alcoholizado, por el Camino del Buen Ayre, a la altura del partido de Hurlingham.
El luctuoso hecho, que se conoció ayer, se produjo el domingo último a la madrugada en la mano hacia el norte de esa autopista, a la altura de Martín Fierro, en la zona oeste del Conurbano.
En ese lugar y en circunstancias que se investigan, el conductor del utilitario Peugeot Partner, el teniente Gastón Alcaraz, tras ingresar a la autopista de contramano y circular a alta velocidad, chocó de frente contra un automóvil Honda City en el que circulaba un matrimonio con sus dos hijos pequeños.
Producto del terrible impacto, el utilitario se elevó y terminó en la mano contraria tras saltar sobre el guard-rail.
Por el siniestro se produjo de inmediato la muerte de la mujer, mientras que la pequeña fue trasladada al Hospital Posadas, de Haedo, donde murió a poco de llegar.
En tanto, el esposo de la mujer fallecida -de 35 años y quien había perdido a un hermano en la tragedia de República de Cromañón- terminó internado en estado de shock, aunque fuera de peligro, al igual que el otro hijo de la pareja, de 7 años.
El teniente fue puesto a disposición de la Justicia y quedó desafectado del servicio ayer lunes, indicaron fuentes policiales a NA.
Según trascendió en forma extraoficial, el teniente Alcaraz en principio admitió que había tomado alcohol luego de haber discutido con su esposa, aunque después se negó a declarar ante el fiscal que instruye el caso.
La causa fue caratulada en principio como "doble homicidio simple", que contempla penas que van de los 8 a los 25 años de prisión.
El oficial, que se desempeñaba en el Comando de Prevención Comunitaria de San Martín, fue desafectado de la Policía por decisión de la Dirección de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad provincial, informaron fuentes de la cartera.
Tremendo dolor
La suegra y abuela de las víctimas mortales, María Rosa, aseguró sentir un "dolor tremendo" y dijo que a su familia la "arruinó" un "loco que venía en una camioneta" y se lamentó por haber sufrido una nueva tragedia, ya que uno de sus hijos, Juan Lanatta (20), fue una de las 194 víctimas del incendio en el boliche Cromañón.