Los captores del ingeniero agrónomo argentino
Santiago López Menéndez, secuestrado el miércoles en
Nigeria, se contactaron con las autoridades y exigen dinero para liberarlo por lo que ya hay un negociador trabajando en su liberación, confirmó ayer su papá, Jorge, y el embajador en el país africano,
Gustavo Dzulaga.
"Se comunicaron los captores y la empresa para la que trabaja Santiago (Four Mills of Nigeria) puso un negociador. Están empezando las conversaciones pero pueden llevar su tiempo", señaló el padre.
Si bien prefirió no especificar la suma exigida como rescate, indicó que la firma le garantizó "que iban a hacer lo que sea para que Santiago esté en libertad" y precisó que se trata de "una multinacional muy fuerte en Nigeria ya que son los mayores productores de harina y galletitas del país". "Es un secuestro extorsivo, no es político, lo que abre una esperanza", manifestó el hombre que vive en Mar del Plata en declaraciones a Radio Brisas.
"Nigeria es un país que tiene mucho petróleo, hay muchos técnicos, por lo que buscan extranjeros que sean respaldados por una empresa grande", agregó. Más temprano, el embajador Dzulaga confirmó el contacto con los secuestradores lo que "es una buena señal y ya se está negociando la liberación".
Los captores del ingeniero agrónomo argentino
Santiago López Menéndez, secuestrado el miércoles en
Nigeria, se contactaron con las autoridades y exigen dinero para liberarlo por lo que ya hay un negociador trabajando en su liberación, confirmó ayer su papá, Jorge, y el embajador en el país africano,
Gustavo Dzulaga.
"Se comunicaron los captores y la empresa para la que trabaja Santiago (Four Mills of Nigeria) puso un negociador. Están empezando las conversaciones pero pueden llevar su tiempo", señaló el padre.
Si bien prefirió no especificar la suma exigida como rescate, indicó que la firma le garantizó "que iban a hacer lo que sea para que Santiago esté en libertad" y precisó que se trata de "una multinacional muy fuerte en Nigeria ya que son los mayores productores de harina y galletitas del país". "Es un secuestro extorsivo, no es político, lo que abre una esperanza", manifestó el hombre que vive en Mar del Plata en declaraciones a Radio Brisas.
"Nigeria es un país que tiene mucho petróleo, hay muchos técnicos, por lo que buscan extranjeros que sean respaldados por una empresa grande", agregó. Más temprano, el embajador Dzulaga confirmó el contacto con los secuestradores lo que "es una buena señal y ya se está negociando la liberación".