Líderes del mundo condenaron ayer la toma de rehenes del grupo islamista somalí
Al Shabaab que mantuvo en vilo a cientos de estudiantes cristianos en una universidad en el noreste de
Kenia, y que dejó al menos 147 muertos y casi 80 heridos.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, condenó "en los términos más enérgicos" ese ataque "terrorista" contra "hombres y mujeres inocentes", al igual que lo hizo el secretario de Estad, John Kerry, en otra declaración similar.
Tras enviar las "más profundas condolencias" a las familias y seres queridos de las víctimas, el portavoz del presidente Barack Obama destacó que Estados Unidos seguirá prestando asistencia a Kenia.
Por su parte, la Alta Representante de la Unión Europea (UE) para la política exterior, Federica Mogherini, condenó ayer el atentado del grupo yihadista somalí, expresó sus condolencias a las familias de los fallecidos y ofreció apoyo al país africano para combatir el extremismo.
"La UE reitera su compromiso de apoyar al gobierno y la población de Kenia para superar la amenaza del terrorismo. Es importante que todos desempeñen su papel si se quiere lograr ese objetivo", dijo Mogherini en un comunicado.