Miles de personas se manifestaron ayer en
Frankfurt contra la política del
Banco Central Europeo (BCE), que inauguró su nueva sede ayer. Tras una serie de protestas varios militantes antiausteridad fueron detenidos y decenas de heridos entre policías y manifestantes. Un total de 35 personas, 14 policías y 21 manifestantes, resultaron heridas.
Numerosos coches fueron incendiados, en medio de unas barricadas elevadas en esa ciudad, capital financiera de
Alemania.
En el interior de la nueva sede, decenas de personalidades participaron en la ceremonia de inauguración en el inmueble de 1.300 millones de euros, que de hecho ocupa ya el BCE desde el pasado otoño boreal.
El presidente del instituto emisor, Mario Draghi, reconoció que el BCE se había convertido en "el centro de las críticas de quienes están frustrados por la situación" en Europa, pero consideró "injustos" esos reproches. Su acción "tiene precisamente como objetivo aliviar" la situación, añadió.
Los manifestantes, convocados por el colectivo anticapitalista Blockupy, se dirigieron hacia la sede del Banco Central Europeo para expresar su oposición a las políticas de austeridad en Europa y particularmente en Grecia.
Miles de personas se manifestaron ayer en
Frankfurt contra la política del
Banco Central Europeo (BCE), que inauguró su nueva sede ayer. Tras una serie de protestas varios militantes antiausteridad fueron detenidos y decenas de heridos entre policías y manifestantes. Un total de 35 personas, 14 policías y 21 manifestantes, resultaron heridas.
Numerosos coches fueron incendiados, en medio de unas barricadas elevadas en esa ciudad, capital financiera de
Alemania.
En el interior de la nueva sede, decenas de personalidades participaron en la ceremonia de inauguración en el inmueble de 1.300 millones de euros, que de hecho ocupa ya el BCE desde el pasado otoño boreal.
El presidente del instituto emisor, Mario Draghi, reconoció que el BCE se había convertido en "el centro de las críticas de quienes están frustrados por la situación" en Europa, pero consideró "injustos" esos reproches. Su acción "tiene precisamente como objetivo aliviar" la situación, añadió.
Los manifestantes, convocados por el colectivo anticapitalista Blockupy, se dirigieron hacia la sede del Banco Central Europeo para expresar su oposición a las políticas de austeridad en Europa y particularmente en Grecia.