El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó anoche que se encuentra en una actitud "más optimista que pesimista" sobre una salida al conflicto en el este de Ucrania, y subrayó que "no hay una solución militar" y llamó encarecidamente a respetar el alto el fuego por la paz.
En una rueda de prensa en las Naciones Unidas, el presidente ruso aseguró que, a pesar de los conflictos aún existentes, se ha producido "una significativa reducción de la violencia" en el este de Ucrania desde la firma de los acuerdos de Minsk la semana pasada, después de que más de 5 mil personas resultaron muertas por los choques entre tropas leales a Kiev y separatistas prorrusos en los últimos diez meses.
"Espero que los recientes acuerdos de Minsk sean respetados por ambas partes y seamos capaces de encontrar el camino de resolver este difícil conflicto por el que estamos atravesando", resaltó.
Destacó además que: "No hay otro camino" a los acuerdos pactados en la cumbre y agregó que ese documento contempla la concesión de una amplia autonomía a las regiones del este de Ucrania, dentro de una reforma constitucional en el país.
Desde la firma del acuerdo el pasado día 12, el mayor número de violaciones al alto el fuego se ha producido en la estratégica ciudad de Debáltsevo, donde unos 8 mil soldados ucranianos se encuentran cercados por separatistas prorrusos.
Putin expresó su confianza en que los separatistas puedan ofrecer una salida a las tropas gubernamentales cercadas y "las autoridades ucranianas no impidan que los soldados ucranianos depongan las armas".
Las tropas de Ucrania y los separatistas se acusan mutuamente de no respetar el alto el fuego, al que se ha llegado con la mediación de los países intervinientes como Francia y Alemania.
En los acuerdos firmados la semana pasada en la capital de Bielorrusia se contempla la retirada de armas pesadas a partir del segundo día de alto al fuego, esto sería a partir de hoy.
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El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó anoche que se encuentra en una actitud "más optimista que pesimista" sobre una salida al conflicto en el este de Ucrania, y subrayó que "no hay una solución militar" y llamó encarecidamente a respetar el alto el fuego por la paz.
En una rueda de prensa en las Naciones Unidas, el presidente ruso aseguró que, a pesar de los conflictos aún existentes, se ha producido "una significativa reducción de la violencia" en el este de Ucrania desde la firma de los acuerdos de Minsk la semana pasada, después de que más de 5 mil personas resultaron muertas por los choques entre tropas leales a Kiev y separatistas prorrusos en los últimos diez meses.
"Espero que los recientes acuerdos de Minsk sean respetados por ambas partes y seamos capaces de encontrar el camino de resolver este difícil conflicto por el que estamos atravesando", resaltó.
Destacó además que: "No hay otro camino" a los acuerdos pactados en la cumbre y agregó que ese documento contempla la concesión de una amplia autonomía a las regiones del este de Ucrania, dentro de una reforma constitucional en el país.
Desde la firma del acuerdo el pasado día 12, el mayor número de violaciones al alto el fuego se ha producido en la estratégica ciudad de Debáltsevo, donde unos 8 mil soldados ucranianos se encuentran cercados por separatistas prorrusos.
Putin expresó su confianza en que los separatistas puedan ofrecer una salida a las tropas gubernamentales cercadas y "las autoridades ucranianas no impidan que los soldados ucranianos depongan las armas".
Las tropas de Ucrania y los separatistas se acusan mutuamente de no respetar el alto el fuego, al que se ha llegado con la mediación de los países intervinientes como Francia y Alemania.
En los acuerdos firmados la semana pasada en la capital de Bielorrusia se contempla la retirada de armas pesadas a partir del segundo día de alto al fuego, esto sería a partir de hoy.
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