A pocos días de la tradicional
cena blanca, los preparativos se aceleran entre los jóvenes, la mayoría ya adquirió los vestidos cuyos costos son significativos, y que sumado a los accesorios y la tarjeta suponen un considerable costo de un promedio de 6.300 pesos. La tendencia de los vestidos capitalinos sigue en los tonos blanco, natural y con mucho brillo, en el interior de la provincia los de colores, todos lánguidos.
En materia de precios, en una de las casas locales que confecciona centenares de vestidos, registró un incremento del 50 % en el precio de los mismos desde el inicio de año en que algunos optaron por los planes de financiamiento, quienes están retirando vestidos a 2.900 pesos por ejemplo, cuando actualmente están a 3.900 pesos.
Según explicó
Eugenia Jamarlli, de Abigail Confecciones, el precio ascendió debido a las piedras, gemas, mostacillas y strass cuyo precio se incrementó a 20 pesos cada una, que además se colocan manualmente en un trabajo artesanal. Además suma al costo del vestido, el uso de guipur, una tela muy fina calada y algunas con piedras, que son importadas, que hacen que su uso por la extensión se incremente a 13 mil pesos.
"Ya nos estamos haciendo conocida como "
capital del vestido", hemos tenido muchos pedidos del Sur, tenemos una competencia y eso hace que seamos mejores, tenemos que innovar", aseguró Jamarlli destacando la mano de obra local especializada por las técnicas y modelos únicos que produce, quienes crean de acuerdo a la tendencia porque los eventos generan más exigencia.
"Los precios están desde 2.500 en adelante, otros muy trabajados de 5.000, y otros cortos de 800 pesos que los hacemos a medida. La demanda de vestidos al parecer -a diferencia de otros años- es de vestidos enteros, corte imperio, espalda descubierta y mucho brillo, incluso drapeado y algunos colores como salmón, natural, coral", afirmó por su parte, Ailén de Nicole Boutique mientras mostraba uno de vidriera en microtul elastizado con la espalda descubierta, asegurando que pese a la fecha las chicas siguen buscando.
Sin embargo, en una casa de diseñador local de calle Otero, los vestidos exhibidos también de gran calidad los precios tienen una base de 8.500 mil pesos en adelante, y se complementa el servicio de peluquería y maquillaje, que si se trata de clientas que adquirieron el vestido, implica un 15 % de descuento.
El arreglo del cabello y maquillaje es un costo que debe sumarse, y en este caso fue de 800 pesos, para ambos, aunque en una galería de calle Necochea, una peluquería oferta el mismo servicio a 600 pesos.
Otro de los detalles a la hora de arreglarse entre las chicas implica sumar accesorios, pero debido al brillo de la tendencia no sería abundante, no obstante se pueden encontrar variados en una casa de accesorios de una galería de la peatonal a 315, 348, 396 pesos los aros, una suerte de peineta con strass y/o plumas a 416, tiara a 246, y conjuntos dorados de aros con piedras y collar a 739 pesos, o pulseras solas entre 440 y 540, y los sobres van desde 300 pesos.
No pueden faltar las sandalias, cuya tendencia es de taco alto y plataforma, y hay desde 1.200 y 395 a 2.500 de cuero, los bajos desde 720, en distintas zapaterías del centro.
Claro que los costos son los que corresponden a las jóvenes, que sumando los precios más bajos rondan los 5.900 pesos, que más el gasto de la tarjeta de 450 pesos es 6.350 pesos.
La tendencia
“En el 2015 la tendencia es todo lo lánguido. Capital siempre ha respetado el blanco pero se ha ido un poquito por los pasteles tratando de incrementar el color, sin embargo San Pedro ha salido con todos los colores, El Talar también, fucsias, naranjas hasta negro”, explicó María Eugenia Jamarlli, de Abigail Confecciones, al referirse a la tendencia que se verá en la cena blanca.
En la tradicional pasarela se estima que se verán vestidos lánguidos o sea sin volumen, con gasa muselina, seda, boal de la novia, raso italiano, piel de ángel, que debido a su caída y peso crean ese efecto. El plateado es la última tendencia así que también habrá mucho brillo plateado y dorado en pedrería, y gemas.
Se combina además con un corte imperio, desde el busto y hasta la cintura pero no hasta cadera baja como solía usarse en otros años. La espalda descubierta es otra de las tendencias para este año, que debe ser a medida, y algunos con tul transparente y cerrado hasta el cuello con mucho uso de escote corazón y atrás bordado y trasparencias.
El corte sirena al cuerpo es otra que sigue vigente pero depende del cuerpo de la cliente, pero continúa siendo uno de los elegidos por las jóvenes.
Además ya no se usará corsé como en los últimos años, que sólo optan las más chicas para sus fiestas de quince años que suele combinar con distintos largos materiales, al igual que en novias.
En cuanto a los accesorios, se prevé que sean de menor uso ante la abundancia de brillos y piedras en los vestidos, con lo cual se usará aros pequeños, pulsera, collar pequeño o muñequera, una a la vez.
A pocos días de la tradicional
cena blanca, los preparativos se aceleran entre los jóvenes, la mayoría ya adquirió los vestidos cuyos costos son significativos, y que sumado a los accesorios y la tarjeta suponen un considerable costo de un promedio de 6.300 pesos. La tendencia de los vestidos capitalinos sigue en los tonos blanco, natural y con mucho brillo, en el interior de la provincia los de colores, todos lánguidos.
En materia de precios, en una de las casas locales que confecciona centenares de vestidos, registró un incremento del 50 % en el precio de los mismos desde el inicio de año en que algunos optaron por los planes de financiamiento, quienes están retirando vestidos a 2.900 pesos por ejemplo, cuando actualmente están a 3.900 pesos.
Según explicó
Eugenia Jamarlli, de Abigail Confecciones, el precio ascendió debido a las piedras, gemas, mostacillas y strass cuyo precio se incrementó a 20 pesos cada una, que además se colocan manualmente en un trabajo artesanal. Además suma al costo del vestido, el uso de guipur, una tela muy fina calada y algunas con piedras, que son importadas, que hacen que su uso por la extensión se incremente a 13 mil pesos.
"Ya nos estamos haciendo conocida como "
capital del vestido", hemos tenido muchos pedidos del Sur, tenemos una competencia y eso hace que seamos mejores, tenemos que innovar", aseguró Jamarlli destacando la mano de obra local especializada por las técnicas y modelos únicos que produce, quienes crean de acuerdo a la tendencia porque los eventos generan más exigencia.
"Los precios están desde 2.500 en adelante, otros muy trabajados de 5.000, y otros cortos de 800 pesos que los hacemos a medida. La demanda de vestidos al parecer -a diferencia de otros años- es de vestidos enteros, corte imperio, espalda descubierta y mucho brillo, incluso drapeado y algunos colores como salmón, natural, coral", afirmó por su parte, Ailén de Nicole Boutique mientras mostraba uno de vidriera en microtul elastizado con la espalda descubierta, asegurando que pese a la fecha las chicas siguen buscando.
Sin embargo, en una casa de diseñador local de calle Otero, los vestidos exhibidos también de gran calidad los precios tienen una base de 8.500 mil pesos en adelante, y se complementa el servicio de peluquería y maquillaje, que si se trata de clientas que adquirieron el vestido, implica un 15 % de descuento.
El arreglo del cabello y maquillaje es un costo que debe sumarse, y en este caso fue de 800 pesos, para ambos, aunque en una galería de calle Necochea, una peluquería oferta el mismo servicio a 600 pesos.
Otro de los detalles a la hora de arreglarse entre las chicas implica sumar accesorios, pero debido al brillo de la tendencia no sería abundante, no obstante se pueden encontrar variados en una casa de accesorios de una galería de la peatonal a 315, 348, 396 pesos los aros, una suerte de peineta con strass y/o plumas a 416, tiara a 246, y conjuntos dorados de aros con piedras y collar a 739 pesos, o pulseras solas entre 440 y 540, y los sobres van desde 300 pesos.
No pueden faltar las sandalias, cuya tendencia es de taco alto y plataforma, y hay desde 1.200 y 395 a 2.500 de cuero, los bajos desde 720, en distintas zapaterías del centro.
Claro que los costos son los que corresponden a las jóvenes, que sumando los precios más bajos rondan los 5.900 pesos, que más el gasto de la tarjeta de 450 pesos es 6.350 pesos.
La tendencia
“En el 2015 la tendencia es todo lo lánguido. Capital siempre ha respetado el blanco pero se ha ido un poquito por los pasteles tratando de incrementar el color, sin embargo San Pedro ha salido con todos los colores, El Talar también, fucsias, naranjas hasta negro”, explicó María Eugenia Jamarlli, de Abigail Confecciones, al referirse a la tendencia que se verá en la cena blanca.
En la tradicional pasarela se estima que se verán vestidos lánguidos o sea sin volumen, con gasa muselina, seda, boal de la novia, raso italiano, piel de ángel, que debido a su caída y peso crean ese efecto. El plateado es la última tendencia así que también habrá mucho brillo plateado y dorado en pedrería, y gemas.
Se combina además con un corte imperio, desde el busto y hasta la cintura pero no hasta cadera baja como solía usarse en otros años. La espalda descubierta es otra de las tendencias para este año, que debe ser a medida, y algunos con tul transparente y cerrado hasta el cuello con mucho uso de escote corazón y atrás bordado y trasparencias.
El corte sirena al cuerpo es otra que sigue vigente pero depende del cuerpo de la cliente, pero continúa siendo uno de los elegidos por las jóvenes.
Además ya no se usará corsé como en los últimos años, que sólo optan las más chicas para sus fiestas de quince años que suele combinar con distintos largos materiales, al igual que en novias.
En cuanto a los accesorios, se prevé que sean de menor uso ante la abundancia de brillos y piedras en los vestidos, con lo cual se usará aros pequeños, pulsera, collar pequeño o muñequera, una a la vez.