Desde 2005, cuando
la Yugular solo era una idea, sus integrantes ya sabían que nacía algo más que una banda de reggae.
Era el deseo que ardía en cada uno de ellos, el de crecer en la
música con sonidos propios. El de evolucionar y revolucionar los oídos atentos, de saber que no pasarían desapercibidos.
Y es así que La Yugular fue mutando, fue creciendo, fue creando un estilo haciéndose camino al andar.
Cada presentación fue un desafío constante que ponía a prueba, pero también fue su única motivación para seguir, sin mirar atrás.
Entonces los chicos que unieron sus talentos para hacer música, llegaron de Perico y Humahuaca a esta ciudad, donde otros esperaban hacer que sus influencias se unieran en mixturas sorprendentes.
De rock, ska, reggae y folclore andino se visten los sonidos que proyectan desde su interpretación instrumental y colectiva. Y logran, desde el escenario, enaltecer a puro ritmo, nuestras costumbres ancestrales que son intensamente interpretadas por ellos, unos artistas que se brindan por completo.
Corazón y sentimiento, alegría y diversión, son algunas de las sensaciones que confluyen en el vivo de "La Yugu" cada vez que se presenta frente a las almas hábidas de originalidad y talento, cualidades que vienen con ellos desde los primero tiempos y que se encargan de renovarlas a la perfección siempre que pueden.
Así diferentes espacios culturales los vieron tocar. Pasearon su música y ese ritmo atrapante en bares de nuestra ciudad, encuentros y festivales que hicieron de su arte el mayor de los atractivos. Y esta posibilidad fue una puerta que se abrió para una agrupación que no jugaba al azar, que pisaba fuerte y tenía bien claro que llegar a la meta era cuestión de trabajar con esfuerzo y, sobre todo, voluntad. Entonces viajar a otros lugares generó nuevas perspectivas, nuevos anhelos y con ellos la confianza para realizar su sueño.
Buenos Aires, Córdoba y Tucumán eran los nuevos destinos, allí comenzaron a establecer su sello en diferentes circuitos y la cercanía con los pares fue sin dudas el mejor aprendizaje.
De la mano del reggae fueron por nuevos rumbos, incentivados por la carrera en ascenso que con mucho sacrificio lograron obtener. Por eso La Yugular, además de ser una banda es una sorpresa por sí misma.
Una criatura musical bien jujeña que en 2010 dio el gran salto. Y es que en ese año, los músicos editaron su primer disco de estudio al que denominaron Plantate!. Un trabajo muy elaborado que fue y es reggae en esencia, pero que no deja de tener un estilo muy particular. La Yugular se sigue reinventando, sigue renaciendo y regenerándose. Es sin dudas, una formación que hasta el día de hoy, es fiel representante de un género poco común en nuestra provincia pero que ha sobrevivido en ellos y se siente a través de ellos. Las expectativas y las ganas no cambiaron. Los integrantes continúan con su meta intacta y ya llegaron lejos por esa calidad y entrega permanente. Por eso no fue casualidad que fueran elegidos a nivel nacional como una de las bandas más sobresalientes luego de participar y de ser coronados campeones en el Rototom 2013, uno de los festivales más importantes que reúne a bandas agrupaciones reggae a nivel internacional. Los dueños de este logro son Marcos Vrech en batería, Demian Salerno en el bajo, Galo Maidana en guitarra y coros, Milton Colque en sikus, zankas y accesorios, Claudio Rojas en charango, Sergio Saracho en voz y Mario Rocha en teclados, quienes con este reconocimiento, tomaron más impulso para seguir. Y su carrera vuelve a ir "in crescendo", porque ahora están a punto de lanzar su segundo disco. Un nuevo álbum que es un cóctel musical donde se juntan muchos géneros, con un mismo estilo. El único que puede tener solo La Yugular. Las canciones de este CD ya vieron la luz en los últimos recitales y la respuesta del público no se hizo esperar. El aplauso llegó para los artistas que decidieron trabajar junto Goy Ogalde y ser uno, dentro del proyecto "Kangrejos Records (sonido originario)" . De esta manera, los chicos fueron mixturando teclados psicodélicos y sikus, o guitarras que combinan voces y matices vocales dignos de destacar. Aquí cumbias, tinkus y folclore andino, se entrelazan con el rock y el dub. Y el ska no se queda afuera, hace lo propio y se luce en composiciones que regalan todo tipo de emociones. No cabe dudas que los músicos de La Yugular siguen con su sueño intacto, el mismo que construyen desde hace tiempo y que no deja de latir siempre en ellos.
Desde 2005, cuando
la Yugular solo era una idea, sus integrantes ya sabían que nacía algo más que una banda de reggae.
Era el deseo que ardía en cada uno de ellos, el de crecer en la
música con sonidos propios. El de evolucionar y revolucionar los oídos atentos, de saber que no pasarían desapercibidos.
Y es así que La Yugular fue mutando, fue creciendo, fue creando un estilo haciéndose camino al andar.
Cada presentación fue un desafío constante que ponía a prueba, pero también fue su única motivación para seguir, sin mirar atrás.
Entonces los chicos que unieron sus talentos para hacer música, llegaron de Perico y Humahuaca a esta ciudad, donde otros esperaban hacer que sus influencias se unieran en mixturas sorprendentes.
De rock, ska, reggae y folclore andino se visten los sonidos que proyectan desde su interpretación instrumental y colectiva. Y logran, desde el escenario, enaltecer a puro ritmo, nuestras costumbres ancestrales que son intensamente interpretadas por ellos, unos artistas que se brindan por completo.
Corazón y sentimiento, alegría y diversión, son algunas de las sensaciones que confluyen en el vivo de "La Yugu" cada vez que se presenta frente a las almas hábidas de originalidad y talento, cualidades que vienen con ellos desde los primero tiempos y que se encargan de renovarlas a la perfección siempre que pueden.
Así diferentes espacios culturales los vieron tocar. Pasearon su música y ese ritmo atrapante en bares de nuestra ciudad, encuentros y festivales que hicieron de su arte el mayor de los atractivos. Y esta posibilidad fue una puerta que se abrió para una agrupación que no jugaba al azar, que pisaba fuerte y tenía bien claro que llegar a la meta era cuestión de trabajar con esfuerzo y, sobre todo, voluntad. Entonces viajar a otros lugares generó nuevas perspectivas, nuevos anhelos y con ellos la confianza para realizar su sueño.
Buenos Aires, Córdoba y Tucumán eran los nuevos destinos, allí comenzaron a establecer su sello en diferentes circuitos y la cercanía con los pares fue sin dudas el mejor aprendizaje.
De la mano del reggae fueron por nuevos rumbos, incentivados por la carrera en ascenso que con mucho sacrificio lograron obtener. Por eso La Yugular, además de ser una banda es una sorpresa por sí misma.
Una criatura musical bien jujeña que en 2010 dio el gran salto. Y es que en ese año, los músicos editaron su primer disco de estudio al que denominaron Plantate!. Un trabajo muy elaborado que fue y es reggae en esencia, pero que no deja de tener un estilo muy particular. La Yugular se sigue reinventando, sigue renaciendo y regenerándose. Es sin dudas, una formación que hasta el día de hoy, es fiel representante de un género poco común en nuestra provincia pero que ha sobrevivido en ellos y se siente a través de ellos. Las expectativas y las ganas no cambiaron. Los integrantes continúan con su meta intacta y ya llegaron lejos por esa calidad y entrega permanente. Por eso no fue casualidad que fueran elegidos a nivel nacional como una de las bandas más sobresalientes luego de participar y de ser coronados campeones en el Rototom 2013, uno de los festivales más importantes que reúne a bandas agrupaciones reggae a nivel internacional. Los dueños de este logro son Marcos Vrech en batería, Demian Salerno en el bajo, Galo Maidana en guitarra y coros, Milton Colque en sikus, zankas y accesorios, Claudio Rojas en charango, Sergio Saracho en voz y Mario Rocha en teclados, quienes con este reconocimiento, tomaron más impulso para seguir. Y su carrera vuelve a ir "in crescendo", porque ahora están a punto de lanzar su segundo disco. Un nuevo álbum que es un cóctel musical donde se juntan muchos géneros, con un mismo estilo. El único que puede tener solo La Yugular. Las canciones de este CD ya vieron la luz en los últimos recitales y la respuesta del público no se hizo esperar. El aplauso llegó para los artistas que decidieron trabajar junto Goy Ogalde y ser uno, dentro del proyecto "Kangrejos Records (sonido originario)" . De esta manera, los chicos fueron mixturando teclados psicodélicos y sikus, o guitarras que combinan voces y matices vocales dignos de destacar. Aquí cumbias, tinkus y folclore andino, se entrelazan con el rock y el dub. Y el ska no se queda afuera, hace lo propio y se luce en composiciones que regalan todo tipo de emociones. No cabe dudas que los músicos de La Yugular siguen con su sueño intacto, el mismo que construyen desde hace tiempo y que no deja de latir siempre en ellos.