Otro factor importante en el tema es la imposición social, porque es común observar en publicidades o programa televisivos imágenes de mujeres delgadas que pueden llevar a las adolescentes a creer que ese es el ideal de belleza, y eso sin duda se reflejará en su comportamiento.
Este es el caso que una de las vendedoras relató a este matutino: "nosotras vendemos talles hasta el 42, es una sola marca y se caracteriza por la confección ancha; pero ahora el adolescente siempre pide ropa muy al cuerpo y más chica, se nos da más casos de esos", indicó Tatiana Medina.
La comerciante que trabaja desde hace algunos años, sostuvo que desde el 2010 notó que las chicas se acercan a pedir vestidos más cortos o pegados al cuerpo, porque los que se les ofrece "dicen" que son grandes.
Sin embargo estos talles que son rechazados suelen ser un dos o un tres, esto quiere decir que las mujeres no encuentran un talle acorde a su cuerpo. Muchas adolescentes buscan reducir cada vez más los talles de los que usan.
La solución que encontraron algunas que no consiguen talles es vestirse con ropas de varón, que son de confección más grande por naturaleza.
