A poco de cumplirse siete meses de la desaparición del docente jubilado y pastor evangélico Luis Gordillo, su hermana Amelia Gordillo hizo el pedido a las autoridades competentes para que se siga investigando.
Indicó que no se sabe nada sobre su paradero "la familia cree que alguien sabe algo y sobre eso debería profundizarse la investigación", dijo Amelia, al tiempo de apuntar que la Policía asegura haber hecho todo lo necesario, pero "como familia continuamos esperando respuestas".
Al remontarse al día y la hora del hecho, Amelia sostuvo que su hermano desapareció el pasado 9 de octubre, a las dos y media de la tarde desde la plazoleta que colinda con su casa, ubicada en un sector del barrio Antonio Bernachi, de la ciudad de San Pedro de Jujuy.
"Almorzamos y se sentó acá en estos tronquitos que hay en el jardín de la casa. Cuando yo salí se fue a sentar en un banquito ubicado a tres metros mi casa. Después se trasladó a otro banco para poder ver la gente pasar por la avenida. Volví a casa a buscar la llave para irme con él y cuando regresé ya no estaba. Mi hermano no estaba en ese banco y no volví a verlo nunca más. Pasaron más de 6 meses y no se sabe nada", dijo Amelia Gordillo.
Manifestó además que de inmediato radicó la denuncia y durante la primera semana vinieron de todos lados. "Fue una semana en la que llegaron de varios organismos, de la Policía, de búsqueda de personas, de la División canes, pero pasada esa semana, nunca regresaron. No se sabe más nada. Lo único que pido es que se siga investigando y que por lo menos vengan y me comuniquen algo de lo que pasó", dijo al apuntar que la policía le expresó que cuando se sepan algo le comunicarán. "Desde entonces vivo sin saber qué es lo que pasó con mi hermano, es un interrogante que lastima mucho".
Luis Gordillo era docente jubilado y era pastor en una iglesia evangélica, todos los días a las 20.30 iba a la iglesia y regresaba, también militaba en el Partido Justicialista y era un gran luchador por la defensa de los derechos de los docentes.
"Es una persona muy conocida acá en San Pedro, muy querida. Por eso nadie puede entender cómo una persona puede desaparecer a plena luz del día y que no se sepa absolutamente nada. No se puede entender, que nadie lo haya visto. Que nadie sepa para dónde fue, que no lo vieran caminando, no saben nada. Para mí es una desaparición muy extraña, no se lo puede haber tragado la tierra", enfatizó la hermana.
Muchas dudas
"Nadie puede desaparecer así. Alguien tiene que haberlo visto, pienso que mi hermano está en algún lado, que alguien lo tiene pero no sé con qué motivo. Hay algunos hechos que ocurrieron días previos a su desaparición que me hacen pensar eso. Alguien lo tiene y le comenté esto a la policía y me dijeron que habían investigado y que no había nada. Todo quedó ahí. Pienso que mi hermano está encerrado en algún lado", dijo Amelia.
La mujer apuntó además, que cuando su hermano comenzó a tener problemas de salud, fue refugiarse en su casa "él necesitaba de nosotros, vino a refugiarse a mi casa, cuando salíamos juntos a la calle, al centro, no mostraba signos de que se perdía. Inclusive el día anterior de aquí se fue a la casa de mi tía que vive en el barrio 23 de agosto. Fue a tomar té y regresó, por eso no creemos que se perdió, algo debe haber pasado", relató Amelia.