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Un hombre en Estados Unidos llegó a las costas de Florida para pasar un día de vacaciones en su lancha, pero todo terminó en penoso accidente. Cuando salió del mar tenía un tiburón nodriza clavado en el vientre.
Ervin Mccarty apenas pudo nadar unos metros hasta que sintió un fuerte dolor en el abdomen. Al volver a su embarcación notó que tenía el pez incrustado en el cuerpo. “Me quitó la respiración así que tenía que subir para tomar aire, pero al mismo tiempo sentía que quería abrirme. Pensé que iba a ahogarme. Tuve que regresar al bote sin poder usar las manos, que las tenía en el tiburón”, contó Mccarty en su página de Facebook.
En un video grabado por uno de sus acompañantes se ve cómo el hombre se desespera al instante y se tiende en el piso. Acuden sus amigos a auxiliarlo y uno de ellos cercena al tiburón con un cuchillo. Luego de unos minutos el animal moribundo lo suelta de sus fauces.
La herida no terminó resultando tan grave, aunque fue muy dolorosa. El pez fue devuelto al mar, donde probablemente murió producto de los cortes que recibió.
