El Gobierno de
Grecia anunció ayer una "reducción considerable" de arribos de migrantes y
refugiados al país en las últimas 24 horas ante el cierre de la ruta de los Balcanes y el inicio de un proceso de deportaciones acordado con
Turquía, lo que aumenta el temor a que las redes de traficantes desarrollen rutas alternativas.
En el último día sólo 68 inmigrantes llegaron a Grecia desde Turquía, informó el Comité del Gobierno griego encargado de la gestión de la crisis de refugiados, un día después de que 225 inmigrantes cruzaran el Egeo desde el país euroasiático para llegar a las islas griegas.
El lunes habían sido devueltos 202 inmigrantes en el marco de un acuerdo migratorio firmado entre la Unión Europea (UE) y Turquía que entró en vigor el 20 de marzo y que contempla la deportación de todo inmigrante irregular llegado a las islas griegas que no pida asilo en Grecia o que no califique para obtenerlo.
"La Policía y los guardacostas están en alerta, aunque todavía no hay indicios de un éxodo a través de Grecia occidental", destacó un portavoz del centro para la gestión de los refugiados del Gobierno.
Tras la ola de refugiados que buscan asilo en Europa, los traficantes intentan aprovechar sobre todo el periodo de turismo, cuando "aumentan mucho las llegadas y las partidas y el control de los pasajeros se hace difícil", señaló por su parte una fuente de la Policía de Corfú citada por el diario griego Ethnos.
El Gobierno de
Grecia anunció ayer una "reducción considerable" de arribos de migrantes y
refugiados al país en las últimas 24 horas ante el cierre de la ruta de los Balcanes y el inicio de un proceso de deportaciones acordado con
Turquía, lo que aumenta el temor a que las redes de traficantes desarrollen rutas alternativas.
En el último día sólo 68 inmigrantes llegaron a Grecia desde Turquía, informó el Comité del Gobierno griego encargado de la gestión de la crisis de refugiados, un día después de que 225 inmigrantes cruzaran el Egeo desde el país euroasiático para llegar a las islas griegas.
El lunes habían sido devueltos 202 inmigrantes en el marco de un acuerdo migratorio firmado entre la Unión Europea (UE) y Turquía que entró en vigor el 20 de marzo y que contempla la deportación de todo inmigrante irregular llegado a las islas griegas que no pida asilo en Grecia o que no califique para obtenerlo.
"La Policía y los guardacostas están en alerta, aunque todavía no hay indicios de un éxodo a través de Grecia occidental", destacó un portavoz del centro para la gestión de los refugiados del Gobierno.
Tras la ola de refugiados que buscan asilo en Europa, los traficantes intentan aprovechar sobre todo el periodo de turismo, cuando "aumentan mucho las llegadas y las partidas y el control de los pasajeros se hace difícil", señaló por su parte una fuente de la Policía de Corfú citada por el diario griego Ethnos.