En cada rincón del país se vivió la final de ayer entre Argentina y Chile de una manera especial y a su manera. Pero en pocos lugares, como sucedió en Mendoza.
La provincia vecina al país trasandino vivió su propia final. Desde temprano las casas, los negocios tanto legales como los puestos callejeros, se ataviaron con la "celeste y blanca". Pero no fueron los únicos colores que primaron, sino que además, aunque en mucho menos presentismo, los colores de la bandera chilena también se hicieron presentes. Era un clásico para todos.
La comunidad trasandina en la tierra "del buen vino" se hizo notar. También colgaron banderas y las "chicanas" se hicieron sentir, aunque siempre con respeto por parte de ambos. Claro, se trataba de la previa solamente.
Todos hablaban de la presentación "albiceleste", pero no precisamente de Gimnasia que anoche tuvo su encuentro ante Independiente Rivadavia. Todos hacían referencia al equipo del "Tata" Martino que fue de menor a mayor en el certamen continental. Así fue que pocos cayeron en la presencia del "lobo" frente a la "lepra".
Como lo comentó Germán, un remisero mendocino. "Soy hincha de Independiente, pero ahora solo nos importa ganarle a los chilenos". Un pensamiento que se trasladó a todos en Mendoza. Quizás es la rivalidad que existe ante el cuadro del otro lado de la Cordillera de los Andes o la gran comunidad que reside en el cuyo argentino. Lo cierto es que allí, la final se vivió diferente. Y no fue solamente ayer, sino además en los días previos. Muchos eligieron la cuidad mendocina para llegar a Chile. Lástima la derrota por penales.
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En cada rincón del país se vivió la final de ayer entre Argentina y Chile de una manera especial y a su manera. Pero en pocos lugares, como sucedió en Mendoza.
La provincia vecina al país trasandino vivió su propia final. Desde temprano las casas, los negocios tanto legales como los puestos callejeros, se ataviaron con la "celeste y blanca". Pero no fueron los únicos colores que primaron, sino que además, aunque en mucho menos presentismo, los colores de la bandera chilena también se hicieron presentes. Era un clásico para todos.
La comunidad trasandina en la tierra "del buen vino" se hizo notar. También colgaron banderas y las "chicanas" se hicieron sentir, aunque siempre con respeto por parte de ambos. Claro, se trataba de la previa solamente.
Todos hablaban de la presentación "albiceleste", pero no precisamente de Gimnasia que anoche tuvo su encuentro ante Independiente Rivadavia. Todos hacían referencia al equipo del "Tata" Martino que fue de menor a mayor en el certamen continental. Así fue que pocos cayeron en la presencia del "lobo" frente a la "lepra".
Como lo comentó Germán, un remisero mendocino. "Soy hincha de Independiente, pero ahora solo nos importa ganarle a los chilenos". Un pensamiento que se trasladó a todos en Mendoza. Quizás es la rivalidad que existe ante el cuadro del otro lado de la Cordillera de los Andes o la gran comunidad que reside en el cuyo argentino. Lo cierto es que allí, la final se vivió diferente. Y no fue solamente ayer, sino además en los días previos. Muchos eligieron la cuidad mendocina para llegar a Chile. Lástima la derrota por penales.
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