El déficit fiscal de la Argentina se encuentra entre los más altos de la región respecto del Producto Bruto Interno, aunque la situación se equilibra gracias a los aportes del Banco Central y la Anses al Tesoro.
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El déficit fiscal de la Argentina se encuentra entre los más altos de la región respecto del Producto Bruto Interno, aunque la situación se equilibra gracias a los aportes del Banco Central y la Anses al Tesoro.
De acuerdo con números oficiales publicados por los gobiernos sudamericanos, Brasil cerró el 2014 con un preocupante rojo fiscal equivalente al 5,7 por ciento de su Producto Bruto, seguido por Uruguay, donde el indicador alcanzó al 3,5 por ciento.
En tercer lugar aparece la Argentina, cuyo déficit del sector público nacional fue de 2,5 por ciento del PBI, apuntó el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) en un informe publicado ayer lunes.
Los datos oficiales de Chile indican que ese país cerró el año pasado con un rojo fiscal del 1,6 por ciento de su PBI, mientras que Perú arrojó un 0,6 por ciento de déficit, precisó el análisis de Idesa.
Los datos mostrarían que la Argentina tiene una situación fiscal mucho más controlada que Brasil e incluso que Uruguay y no muy alejada de Chile y Perú, aunque hay otros elementos a tener en cuenta.
Si se excluyeran de los ingresos que registra el Tesoro Nacional las transferencias que realiza el Banco Central de la República Argentina, la Anses y otros organismos estatales, el déficit del sector público nacional ascendería al 4,9 por ciento del Producto Bruto Interno.
"O sea, un desequilibrio fiscal mucho más parecido al de Brasil y entre los más altos de la región", dijo Idesa en su informe, en el que opina que la crisis política y económica de Brasil tiene muchas analogías con la Argentina.
En ese sentido, la entidad privada que analiza la situación económica indicó que "ejemplos muy ilustrativos son las anomalías en la masiva distribución de subsidios a la energía, el transporte y a las empresas públicas".
Idesa dijo que el financiamiento al sector público con transferencias del Banco Central y la Anses "no es sustentable" porque para la entidad monetaria "implica emitir sin respaldo, lo que inevitablemente termina generando inflación".
"Para la Anses implica consumir ahorros previsionales. Por lo tanto, si el próximo gobierno pretende reducir la inflación y cumplir con los futuros jubilados va a ser necesario reducir el alto déficit fiscal", dijo la entidad.