El fiscal de Investigación Penal Nº 6 Gustavo Araya, caratuló el homicidio del comerciante Domingo Núñez como "homicidio simple contra personas a establecer", hecho ocurrido el último fin de semana en el barrio La Virginia de la localidad de Monterrico.
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El fiscal de Investigación Penal Nº 6 Gustavo Araya, caratuló el homicidio del comerciante Domingo Núñez como "homicidio simple contra personas a establecer", hecho ocurrido el último fin de semana en el barrio La Virginia de la localidad de Monterrico.
Además de la investigación se desprendió que el octogenario fue reducido y sentado en un sillón, maniatado de manos cruzadas con la camisa que llevaba puesta y le taparon la boca con un pañuelo, elemento determinante para que se produzca el deceso del hombre, porque según la autopsia que le practicaron, Núñez sufrió una muerte por asfixia y paro cardíaco traumático.
El fiscal de Investigación Penal Nº 6 Gustavo Araya caratuló la causa como "homicidio simple contra personas a establecer".
Hasta el momento no hay detenidos por el crimen del comerciante, pero las investigaciones giran alrededor del entorno del hombre y desde la Fiscalía de Investigación Penal, se ordenó la pericia del teléfono celular del hombre.
Según fuentes oficiosas, el hombre fue descubierto por su hijo, quien se extrañó de la demora en abrir el reconocido negocio de compra venta que el propietario tiene en la ciudad tabacalera. Y cuando se hizo presente en el domicilio de su padre, notó que la llave estaba puesta del lado de adentro de la puerta, allí dio inmediata intervención a los efectivos, luego de romper la puerta e ingresar a la triste escena.
Además se supo que el móvil del crimen fue robo, ya que dentro del depósito que tenía dentro del inmueble, se halló desorden y algunos elementos faltantes.
Según testimonios, la víctima, en la noche del viernes fue vista por última vez por sus vecinos sola, cuando ingresaba a su domicilio.
Estos datos refuerzan la hipótesis que, él o los agresores conocían a Núñez, porque no hubo aberturas violentadas ni se escucharon ruidos extraños aquella noche.
El hombre es un conocido comerciante de esa ciudad, que se dedica a la compra venta de objetos desde hace ya un tiempo.
