Dos hombres domiciliados en la ciudad capital adquirieron vehículos que tenían la documentación apócrifa, por lo cual denunciaron ambas situaciones en la Dirección General de Investigaciones. Los rodados fueron comprados en la localidad salteña de General Güemes, tras ver las respectivas ofertas en la red social Facebook.
El primero de los hechos sucedió días pasados, luego que el damnificado realizara una publicación en Facebook el pasado 28 de octubre. En la misma ofreció permutar su camioneta marca Toyota Hilux 4x2, dejando su número de contacto para un eventual interesado.
En ese contexto, horas más tarde se comunicó con el denunciante un hombre de General Güemes a quien le explicó las características del rodado y luego acordaron un punto de encuentro para el intercambio de vehículos, ya que el sospechoso le iba a entregar otra Toyota Hilux de un modelo más reciente.
De esta manera, ambos se vieron al otro día, el 29 de octubre, en Güemes y permutaron las camionetas con sus respectivas documentaciones. Tras esto, el damnificado regresó a la ciudad capital sin inconvenientes. Por eso, días pasados se acercó a un gestor del automotor para los trámites de transferencia del vehículo. Sin embargo, en ese momento descubrió que el formulario 08, su certificación y legalización eran falsos.
En consecuencia, el hombre se dirigió a la Dirección General de Investigaciones, en el barrio Chijra de la capital, y denunció la irregularidad aportando la documentación en cuestión.
Mientras que el segundo caso obedeció a un hecho ocurrido días atrás en la ciudad capital, en momentos que el damnificado vio en la red social Facebook la oferta de un auto marca Volkswagen Gol Trend.
Ante esta situación, la víctima se puso en contacto con el sujeto, quien le explicó las características del vehículo. Por su parte, el interesado ofreció pagar el rodado mediante la suma de 10 millones de pesos más la entrega de una moto Yamaha de 200 cc de cilindrada.
Luego de ponerse de acuerdo en cómo llevar adelante la transacción acordó que el encuentro sea en una estación de servicio de General Güemes. Allí el damnificado entregó la moto y la millonaria suma de dinero a cambio del auto para luego regresar a la capital provincial.
Pasaron algunos días y el denunciante se acercó a una gestoría del automotor parta tramitar la transferencia del auto. Allí supo que la documentación que recibió en la localidad salteña era apócrifa.
Finalmente, luego de la mala noticia recibida el comprador del rodado se dirigió a la Dirección de Investigaciones para hacer la denuncia.