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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció ayer que devolvió a su abogado el dinero que éste abonó a una actriz porno pese a haber dicho antes que no sabía nada de los pagos, aunque subrayó que esa plata, con la que se compró el silencio de la mujer sobre una relación íntima con el magnate, no tuvo nada que ver con su campaña.
En una serie de tuits matinales, Trump dijo que su abogado Michael Cohen recibía un pago mensual por servicios a prestar, y que el letrado usó esos fondos para firmar un acuerdo con la actriz Stormy Daniels para que ésta no hablara en público y así "frenar las acusaciones falsas y extorsivas hechas por ella sobre un encuentro" sexual.
El dinero "no tuvo nada que ver con la campaña", destacó Trump, en un esfuerzo por evitar que el escándalo se convierta en un proceso por fraude financiero electoral.
Los comentarios contradicen declaraciones previas en las que el presidente había asegurado que no estaba al tanto de que su abogado hubiera hechos pagos a la actriz poco antes de las elecciones de 2016.
Horas antes, el exalcalde de Nueva York Rudolph Giuliani, otro de los representantes legales de Trump, había revelado que el presidente devolvió a Cohen los 130 mil dólares que éste pagó a Daniels como parte del acuerdo de confidencialidad sobre sus citas sexuales con el mandatario, ocurridas en 2006 y 2007.
La actriz, cuyo verdadero nombre es Stephanie Clifford, inició una demanda en un tribunal para que se declare inválido el acuerdo porque según dijo, en su momento, Trump no lo había firmado.
