Dos palestinos murieron ayer, uno en Cisjordania y otro en Gaza, en medio de renovadas protestas en todo el territorio contra las nuevas restricciones israelíes para el rezo de los musulmanes en la Explanada de las Mezquitas, un sitio sagrado tanto para el islam como para el judaismo.
La jornada comenzó tranquila y sin incidentes en la Mezquita del Al Aqsa y los musulmanes mayores de 50 años pudieron rezar sin dentro del complejo, según confirmaron tanto el Waqf, la autoridad religiosa que administra el lugar, como la policía israelí.
Sin embargo, afuera hubo algunas corridas e incidentes provocados por las decenas de personas menores de 50, a los que la policía les impidió ingresar a la Ciudad Vieja.
La Media Luna Roja palestina informó que atendió a cuatro heridos en un hospital itinerante instalado junto a la Explanada de las Mezquitas y a 13 en otras ciudades de Cisjordania.
Como suele pasar en esta región de conflicto, las escaladas de violencia no se limitan a una ciudad o a un territorio, sino que con rapidez todo el conflicto se contagia de la tensión y el estallido es siempre una posibilidad palpable.
En Gaza, un palestino de 16 años murió por un disparo en la cabeza y siete resultaron heridos en una manifestación convocada para rechazar las restricciones israelíes en torno a la Explanada de las Mezquitas.
El ministerio de Salud precisó que Hussein Abu Hasima murió por disparos de las fuerzas israelíes en las inmediaciones del campo de refugiados Bureij, en el centro de la Franja de Gaza, y que fue trasladado junto a los siete heridos al hospital Shuhada Al Aqsa, en Deir al Balah.
Por su parte, las fuerzas de seguridad israelíes reportaron que cientos de palestinos marcharon hacia la frontera de Gaza con Israel y arrojaron rocas y fuego contra los agentes, que respondieron con disparos hacia la multitud.
"Las fuerzas de seguridad respondieron disparando al aire con el fin de parar a los instigadores, pero los protestantes siguieron avanzando pese a las advertencias y los soldados abrieron fuego", dijo una vocera israelí.
El Ejército israelí reportó, además, la muerte de un joven palestino abatido a tiros cuando se lanzó con un cuchillo contra soldados israelíes en el cruce a Gush Etzion, en Cisjordania ocupada y muy próximo a Jerusalén. Los soldados israelíes no sufrieron daños.
Gush Etzion es una de las tantas colonias judías, consideradas ilegales por la legislación internacional, que salpican la Cisjordania ocupada por Israel hace ya cincuenta años.
Desde hace dos semanas la tensión está en aumento en la región, tras la muerte de dos policías israelíes a manos de tres atacantes palestinos, lo que derivó en la imposición de restricciones para el ingreso de los musulmanes al lugar santo de la Ciudad Vieja.
El jueves por la noche, las tropas israelíes desalojaron a cientos de palestinos que querían dormir en el lugar y ayer por la mañana impidieron el ingreso a los varones palestinos menores de 50 años.