LA QUIACA (Corresponsal). Con la llegada del calor, inusual en la Puna jujeña, comenzaron a hacerse oír los reclamos de los usuarios por los cortes de energía eléctrica en esta localidad y zonas aledañas. A diferencia de otras grandes urbes del país donde el factor es el excesivo consumo, en La Quiaca y localidades cercanas el problema parece ser otro. Por lo tanto vecinos quiaqueños y de alrededores hicieron sentir su malestar por los medios de comunicación debido a los reiterados cortes de luz y bajas de tensión, situación que viene generándose a diario y desde hace un tiempo atrás, sin que se expresen los motivos.
Desde el 2012 comenzaron a suceder estos contratiempos que afectan a 17 mil pobladores por día, en aquella oportunidad los prestadores dijeron que "los problemas se deben a las pruebas de funcionamiento del sistema nuevo y con el tiempo todo se normalizará". Pasaron los años y cada verano los quiaqueños deben lamentar electrodomésticos quemados, falta de iluminación en la vía pública debido a los bajones de tensión que dejan sin alumbrado a varios sectores barriales, además las instituciones no pueden desempeñar su labor con normalidad, hay pérdida de mercadería, comida o medicamentos que requieren cadena de frío, entre otras situaciones donde siempre se ve perjudicado el usuario. La ciudad fronteriza no forma parte del Sistema Interconectado Nacional (SIN), por lo tanto desde una antigua central que funcionaba con motores diesel se abastecía a los cuatro departamentos puneños hasta Humahuaca. Con esos "viejos" motores en época de frío, vientos, lluvias o truenos nunca había inconvenientes. "Con la nueva tecnología construida en la central de Piedra Negra distante a 6 kilómetros de La Quiaca, el servicio no es bueno y no ha mejorado nuestra calidad de vida", dijeron vecinalistas.
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LA QUIACA (Corresponsal). Con la llegada del calor, inusual en la Puna jujeña, comenzaron a hacerse oír los reclamos de los usuarios por los cortes de energía eléctrica en esta localidad y zonas aledañas. A diferencia de otras grandes urbes del país donde el factor es el excesivo consumo, en La Quiaca y localidades cercanas el problema parece ser otro. Por lo tanto vecinos quiaqueños y de alrededores hicieron sentir su malestar por los medios de comunicación debido a los reiterados cortes de luz y bajas de tensión, situación que viene generándose a diario y desde hace un tiempo atrás, sin que se expresen los motivos.
Desde el 2012 comenzaron a suceder estos contratiempos que afectan a 17 mil pobladores por día, en aquella oportunidad los prestadores dijeron que "los problemas se deben a las pruebas de funcionamiento del sistema nuevo y con el tiempo todo se normalizará". Pasaron los años y cada verano los quiaqueños deben lamentar electrodomésticos quemados, falta de iluminación en la vía pública debido a los bajones de tensión que dejan sin alumbrado a varios sectores barriales, además las instituciones no pueden desempeñar su labor con normalidad, hay pérdida de mercadería, comida o medicamentos que requieren cadena de frío, entre otras situaciones donde siempre se ve perjudicado el usuario. La ciudad fronteriza no forma parte del Sistema Interconectado Nacional (SIN), por lo tanto desde una antigua central que funcionaba con motores diesel se abastecía a los cuatro departamentos puneños hasta Humahuaca. Con esos "viejos" motores en época de frío, vientos, lluvias o truenos nunca había inconvenientes. "Con la nueva tecnología construida en la central de Piedra Negra distante a 6 kilómetros de La Quiaca, el servicio no es bueno y no ha mejorado nuestra calidad de vida", dijeron vecinalistas.
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