Sanae Takaichi, conservadora de línea dura, fue elegida el martes como la primera mujer en liderar el gobierno de Japón, rompiendo el techo de cristal político y preparando al país para un giro decisivo hacia la derecha.
Se espera que Takaichi, seguidora del ex primer ministro Shinzo Abe y admiradora de la británica Margaret Thatcher, retome el estímulo gubernamental en un intento por impulsar una economía lastrada por un crecimiento lento y el aumento de precios, analizó Reuters.
Takaichi, quien nombró solo a dos mujeres para su gabinete, recibió 237 votos en las elecciones del martes en la cámara baja del Parlamento, compuesta por 465 escaños, y posteriormente obtuvo una votación similar en la cámara alta, con menor poder.
Heredera espiritual del asesinado ex primer ministro Shinzo Abe, Takaichi ha prometido llevar al PLD y a Japón a “una nueva era”, navegando la compleja situación que atraviesa ante la pérdida de la mayoría de la coalición gobernante en el Parlamento y la necesidad de granjearse apoyos de la combativa oposición.
Las opiniones revisionistas de Takaichi en torno al pasado belicista de Japón podrían asimismo revertir años de progreso en la cooperación con Corea del Sur y la distensión con China.
Perfil de referencia del ala dura del PLD, Takaichi tocó la batería en una banda de ‘heavy metal’ en su época universitaria y dio el salto a la política en 1996, después de haber trabajado como presentadora de televisión del canal TV Asahi.
Durante su larga trayectoria política ha ocupado diferentes cargos ministeriales y dentro del partido, como la cartera de Interior y de Seguridad Económica, así como la de Estado para Economía, Comercio e Industria y para Ciencia y Política Tecnológica.