En San Pedro la terminal de ómnibus desierta fue la imagen más contundente de la jornada de protesta de ayer. Al no haber ningún servicio de corta, media y larga distancia, trabajadores, estudiantes y docentes no pudieron, aunque quisieran, llegar a destino. Entonces, allí comenzó la odisea de muchos docentes de zonas rurales que tuvieron que "invadir" las seccionales policiales para justificar mediante exposición su ausencia en el lugar de trabajo.
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En San Pedro la terminal de ómnibus desierta fue la imagen más contundente de la jornada de protesta de ayer. Al no haber ningún servicio de corta, media y larga distancia, trabajadores, estudiantes y docentes no pudieron, aunque quisieran, llegar a destino. Entonces, allí comenzó la odisea de muchos docentes de zonas rurales que tuvieron que "invadir" las seccionales policiales para justificar mediante exposición su ausencia en el lugar de trabajo.
Allí el paro docente llegó a casi el 80 %, haciendo la actividad casi nula, debido también a la fuerte adhesión de los porteros y a la falta de higiene en los establecimientos educativos.
Por otro lado, en la zona urbana, en las escuelas del centro de San Pedro y de los barrios, la actividad fue dispar. Según los propios dirigentes de Adep la adhesión al paro alcanzó el 60 %. En ese sentido, dijeron que "se debe a la amenaza de la ministra Calsina de descontar los días de paro, de lo contrario seríamos muchos más". La gente les demostró su apoyo con un bocinazo por el centro.
En el nivel medio, sucedió prácticamente lo mismo, llegando a un acatamiento del 70 %. Esa cifra tiene un factor particular, que tiene que ver con la ausencia voluntaria del alumnado. Muchos estudiantes no concurrieron a clases.
Muchos comerciantes, manifestaron su apoyo al paro nacional, pero abrieron sus puertas. Por esa razón la actividad en los comercios del centro de la ciudad, de todos los rubros, fue normal.
No así en los dos bancos que se plegaron al paro y cerraron sus puertas. Al estar todos informados sobre esa medida no hubo casi personas sorprendidas por encontrar las puertas del banco cerradas.
En el hospital "Guillermo Paterson" hubo un importante acatamiento a la medida de fuerza, aunque desde la dirección se trabajó intensamente para garantizar las guardias mínimas en todos los servicios que brinda el nosocomio sampedreño.