Los efectivos de la Policía de la Provincia informaron que los 23 bultos de hojas de coca que fueron secuestrados el sábado último en inmediaciones de la localidad de Yala, llegan a los 150 kilogramos y hacen un valor monetario que alcanzaría los 200 mil pesos.
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Los efectivos de la Policía de la Provincia informaron que los 23 bultos de hojas de coca que fueron secuestrados el sábado último en inmediaciones de la localidad de Yala, llegan a los 150 kilogramos y hacen un valor monetario que alcanzaría los 200 mil pesos.
Por el hecho un hombre de 26 años fue demorado y su acompañante permanece prófugo de la Justicia.
Cabe recordar que el hecho se registró alrededor de las 8.30, en un control vehicular rutinario en el destacamento de Yala, sobre ruta nacional N° 9, cuando se detuvo la marcha de vehículo marca Fiat Palio, color blanco, conducido por un hombre quien viajaba en compañía de otro y ante la solicitud de la documentación pertinente, el conductor del rodado optó por darse a la fuga.
Allí se inició una persecución que continuó por un camino alternativo por lo que se perdió de vista.
Minutos más tarde se logró individualizar al vehículo sin chapa patente y con las puertas cerradas estacionado a la altura del puente que se conecta con la localidad de Tiraxi.
Al cabo de unos minutos se hizo presente un hombre quien manifestó ser el dueño del vehículo, y que se dirigía a San Salvador de Jujuy.
Posteriormente en el lugar personal policial fue advertido por una persona de sexo masculino oriundo de la zona, el cual se encontraba a caballo, el mismo refirió que a unos kilómetros con dirección sur, al costado del camino observó unas bolsas negras tiradas entre las malezas.
Razón por lo cual se invitó a subir al móvil para llegar al lugar indicado, donde se logró el hallazgo de la cantidad de 23 bolsas negras, conteniendo varios paquetes de hojas de coca en estado natural.
Personal de Narcotráfico quedó a cargo de la mercadería incautada, como así también procedió a la demora del conductor, siendo trasladado a la sede de la Dirección de Toxicomanía, donde quedó alojado.