Tras una semana de tensiones,
Londres y
París mostraron ayer su voluntad de poner fin "juntos" al problema de los
migrantes que arriesgan su vida intentando cruzar el Canal de la Mancha desde
Francia hacia el Reino Unido.
"Poner fin a esa situación es una prioridad absoluta. Nuestros dos gobiernos están determinados a conseguirlo, y a conseguirlo juntos", afirmaron los ministros del Interior francés y británico, Bernard Cazeneuve y Theresa May, en una declaración conjunta. Los dos gobiernos destacaron su cooperación mutua para intentar detener el exilio voluntario de los miles de migrantes que esperan en la ciudad francesa de Calais una oportunidad para llegar a tierra británica.
Los dos ministros subrayaron sus esfuerzos respectivos. Reino Unido resaltó su aportación de "15 millones de euros para reforzar la seguridad en (la región francesa de) Norte-Paso de Calais" y los 10 millones de euros adicionales desbloqueados esta semana. Francia recordó por su parte que había desplegado "550 policías y gendarmes" en la zona.
Pero una semana especialmente complicada, con la muerte de un migrante en la madrugada del miércoles y miles de intentos de cruzar por el eurotúnel, ha reavivado las tensiones bilaterales.
"Estamos frente a poblaciones que ya no aguantan más", declaró el viernes el presidente francés, François Hollande, tras anunciar que tendría ese mismo día una "conversación" con el primer ministro británico, David Cameron.
"Tenemos que asumir nuestras responsabilidades. Francia no puede actuar sola", añadió Hollande.
Tras una semana de tensiones,
Londres y
París mostraron ayer su voluntad de poner fin "juntos" al problema de los
migrantes que arriesgan su vida intentando cruzar el Canal de la Mancha desde
Francia hacia el Reino Unido.
"Poner fin a esa situación es una prioridad absoluta. Nuestros dos gobiernos están determinados a conseguirlo, y a conseguirlo juntos", afirmaron los ministros del Interior francés y británico, Bernard Cazeneuve y Theresa May, en una declaración conjunta. Los dos gobiernos destacaron su cooperación mutua para intentar detener el exilio voluntario de los miles de migrantes que esperan en la ciudad francesa de Calais una oportunidad para llegar a tierra británica.
Los dos ministros subrayaron sus esfuerzos respectivos. Reino Unido resaltó su aportación de "15 millones de euros para reforzar la seguridad en (la región francesa de) Norte-Paso de Calais" y los 10 millones de euros adicionales desbloqueados esta semana. Francia recordó por su parte que había desplegado "550 policías y gendarmes" en la zona.
Pero una semana especialmente complicada, con la muerte de un migrante en la madrugada del miércoles y miles de intentos de cruzar por el eurotúnel, ha reavivado las tensiones bilaterales.
"Estamos frente a poblaciones que ya no aguantan más", declaró el viernes el presidente francés, François Hollande, tras anunciar que tendría ese mismo día una "conversación" con el primer ministro británico, David Cameron.
"Tenemos que asumir nuestras responsabilidades. Francia no puede actuar sola", añadió Hollande.