El sacerdote
Juan Carlos Molina renunció imprevistamente a su cargo al frente de la
Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (
Sedronar) y la dimisión fue aceptada por la presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Su salida del cargo coincide con nuevas advertencias de la Iglesia católica sobre el avance del narcotráfico en el país.
El sacerdote
Juan Carlos Molina renunció imprevistamente a su cargo al frente de la
Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (
Sedronar) y la dimisión fue aceptada por la presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Su salida del cargo coincide con nuevas advertencias de la Iglesia católica sobre el avance del narcotráfico en el país.