El fútbol no entiende de merecimientos ni esfuerzos, pero tampoco siempre alcanza con garra y corazón para imponerse a un rival. Y eso le sucedió ayer a
Zapla en el "
Emilio Fabrizzi" donde fue derrotado ante
Juventud Antoniana que gracias a la jerarquía de Balborín se llevó 3 puntos con gusto a mucho. Y es así, porque los salteños no fueron avasallantes ni nada por el estilo y con poco le quitaron el invicto al "merengue".
De entrada Zapla fue quien tomó el timón del partido y condujo sus ideas mirando el arco de enfrente. Altamirano sorprendió con un tiro que se fue apenas cerca. Luego, Guaymás corajeó en el área y Maino se lo llevó puesto derrivando al delantero, pero el árbitro hizo la vista gorda. Altamirano tuvo buenas intervenciones y más todavía cuando se juntó con Guaymás. Recién a los 20' Montiglio asomó peligro de la visita con disparo cruzado. Allí hubo un parate por los incidentes en el ingreso del público salteño y eso distrajo a los palpaleños que en una pelota detenida de Ceballo aprovechó Balborín sin marcas para peinar y poner el 1 a 0. Una mínima ventaja lo pagó caro el equipo de Zingariello.
Entonces allí se adelantó el "merengue" y Rodríguez lo tuvo frente al arco, pero remató desviado. Después Villanueva le negó el segundo al "antoniano" tras una maniobra de "Ricky" Gómez. Igual Juventud hizo eso y nada más. Y a los 44' Pérez Tarifa le aplicó un codazo alevoso a Santillán y el juez Montero sacó amarilla cuando era expulsión directa.
La última etapa fue más batallada e imprecisa. Montenegro cabeceó y la bocha besó el parante del golero visitante. A los 8' ingresó un hincha salteño a la cancha para robar la pelota y enviarla a su tribuna. Mientras la policía brillaba por su ausencia. En la reanudación Montenegro otra vez se perdió el empate, pero esta vez bajo el arco. El "santo" no daba muestras de reacción a pesar de la cantidad de figuras dentro de la cancha y es más le dio la iniciativa a Zapla que tampoco supo explotarla. Con la idea fija de poner el marcador en tablas, el dueño de casa dejó espacios en el fondo y ahí sí se vio exigido Salort luego de un zapatazo de Ceballos. Y al final se agigantó la figura de Maino al impedirle la igualdad a Guaymás. Después Medina probó de media distancia y Cartello desperdició un tiro libre inmejorable en medio de un clima de resignación de los simpatizantes siderúrgicos. El cierre fue lamentable por la invasión.