El cantante de flamenco Rafael González Amador fue condenado a la pena de un año y ocho meses de prisión en suspenso por golpear y arrancarle el pelo a su expareja, en un hecho ocurrido en junio de 2013.
El juez Alejandro Litvack, a cargo del Juzgado Nacional Correccional Nº7, dispuso que González Amador deberá concurrir además durante tres años al programa para hombres violentos que se dicta en el Centro de la Mujer "Arminda Aberastury".
El ahora condenado llegó al juicio acusado por el delito de "lesiones leves dolosas agravadas" ya que tras la investigación se pudo comprobar que la madrugada del 6 de junio de 2013 golpeó con unas varas gitanas y le arrancó el pelo a su expareja y bailarina de flamenco Alicia Fluri.
La madrugada del hecho, González Amador fue al departamento donde vivía la víctima, con quien había mantenido una relación de seis meses, y tras entrar al lugar la golpeó en la cara y la sujetó de los cabellos.
La mujer cayó al suelo, la levantó y le arrancó mechones de la cabeza. Luego la apaleó con unos bastones.
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El cantante de flamenco Rafael González Amador fue condenado a la pena de un año y ocho meses de prisión en suspenso por golpear y arrancarle el pelo a su expareja, en un hecho ocurrido en junio de 2013.
El juez Alejandro Litvack, a cargo del Juzgado Nacional Correccional Nº7, dispuso que González Amador deberá concurrir además durante tres años al programa para hombres violentos que se dicta en el Centro de la Mujer "Arminda Aberastury".
El ahora condenado llegó al juicio acusado por el delito de "lesiones leves dolosas agravadas" ya que tras la investigación se pudo comprobar que la madrugada del 6 de junio de 2013 golpeó con unas varas gitanas y le arrancó el pelo a su expareja y bailarina de flamenco Alicia Fluri.
La madrugada del hecho, González Amador fue al departamento donde vivía la víctima, con quien había mantenido una relación de seis meses, y tras entrar al lugar la golpeó en la cara y la sujetó de los cabellos.
La mujer cayó al suelo, la levantó y le arrancó mechones de la cabeza. Luego la apaleó con unos bastones.
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