El USB Type-C tiene como objeto convertirse en el conector para la nueva generación de dispositivos ulrafinos que necesitan más energía y altas tasas de transferencia. También busca eliminar esa fea costumbre del USB tradicional, que nunca entra a la primera. El USB Type-C es reversible. Da igual como lo introduzcamos porque tiene el mismo número de conectores en ambas caras.
La mala noticia es que no es directamente compatible con las versiones actuales, para las que necesita un adaptador. Por otra parte, habrá que ver cómo de rápido reaccionan las administraciones como la europea, que obligó a los fabricantes a adoptar el anterior estándar Micro USB. El USB Implementers Forum espera que las primeras placas y dispositivos con USB Type-C lleguen a las tiendas en unos pocos meses.
Fuente: Gizmodo