La tradición de Halloween se vivió con entusiasmo en distintas localidades de Jujuy. Junto a los festejos en San Salvador, Palpalá y Perico, ciudades como Humahuaca y La Quiaca también fueron escenario de esta colorida celebración, donde grandes y chicos salieron a las calles con sus disfraces.
La creatividad fue el sello de la noche. Los participantes lucieron disfraces de fabricación propia, con máscaras, maquillaje y vestimentas muy elaboradas. Desde una clásica “coya calavera” hasta personajes populares como un dinosaurio o el payaso “It”, las propuestas asombraron a todos los presentes.
Estos encuentros, caracterizados por su ambiente familiar y el esfuerzo individual en la confección de los atuendos, demostraron cómo la festividad se ha consolidado en la provincia, fusionando influencias globales con el ingenio local.