¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

°
12 de Julio,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Peligro potencial, la caldera volcánica de Yellowstone

Jueves, 27 de marzo de 2025 01:00

En una apretada síntesis, describimos características del origen de volcanes. En el interior del planeta se encuentra una sustancia rocosa fundida a más de 1000°C denominada magma. Este material se almacena en cavidades conocidas como "cámara magmática". Cuando las condiciones geológicas son favorables el magma asciende a través de fisuras o conductos aproximadamente cilíndricos, denominados chimeneas, hasta alcanzar la superficie terrestre, donde fluye con el nombre de lava. El orificio del conducto sobre la superficie, se denomina cráter y puede alcanzar decenas de metros de diámetro.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

En una apretada síntesis, describimos características del origen de volcanes. En el interior del planeta se encuentra una sustancia rocosa fundida a más de 1000°C denominada magma. Este material se almacena en cavidades conocidas como "cámara magmática". Cuando las condiciones geológicas son favorables el magma asciende a través de fisuras o conductos aproximadamente cilíndricos, denominados chimeneas, hasta alcanzar la superficie terrestre, donde fluye con el nombre de lava. El orificio del conducto sobre la superficie, se denomina cráter y puede alcanzar decenas de metros de diámetro.

En algunos casos, las cámaras magmáticas son de gran magnitud, por lo tanto sobre la superficie del terreno puede generar pequeños volcanes por chimeneas o fisuras en una región de decenas de kilómetros cuadrados.

Con el tiempo, la corteza terrestre puede colapsar sobre la cámara magmática, generando una gran depresión con una topografía irregular debido a la presencia de volcanes menores y fracturas que originan bloques de rocas de diferentes tamaños. Este fenómeno da origen a lo que se conoce como "caldera volcánica".

Como ocurre con todos los volcanes, pueden encontrarse en distintas etapas de actividad: en enfriamiento, activas o extintas. En el mundo, existen muchos ejemplos de calderas volcánicas. En Argentina, por ejemplo, la Puna jujeña alberga calderas originadas hace millones de años, actualmente "apagadas" (extintas).

Una de las calderas volcánicas más grandes y activas del mundo es la de Yellowstone, ubicada dentro del Parque Yellowstone territorio de Wyoming en el oeste de Estados Unidos. Su superficie hundida abarca aproximadamente 55 por 72 kilómetros y en su interior una cámara magmática con magma.

A diferencia de los volcanes del "cinturón de fuego del pacifico", cuya actividad está vinculada a la tectónica de placas, la caldera de Yellowstone tiene un origen similar al de la Isla Hawái: su magma proviene del interior del planeta y no de la interacción entre las placas tectónicas. En la región existen calderas más antiguas, que hoy están "apagadas"; sin embargo, Yellowstone sigue mostrando actividad, lo que genera preocupación a nivel mundial, ya que una erupción podría tener consecuencias catastróficas en la región y a escala mundial.

Se estima que la caldera se habría originado hace 640.000 años y la última erupción habría ocurrido hace aproximadamente 70.000 años. No existe consenso sobre la posibilidad de una gran erupción inminente de la caldera. Algunos expertos afirman que existe un ciclo de erupción y en el caso de Yellowstone ya se cumplió el tiempo y no hubo erupción, mientras que otros sostienen que los ciclos no son estrictos, en consecuencia la erupción podría ocurrir en cualquier instante.

La caldera tiene actividad magmática, por ejemplo, se registran en la zona miles de sismos por año, la mayoría imperceptibles para el ser humano. En los últimos 20 años, la superficie de la caldera tiene abombamientos de unos 30 centímetros, que luego desaparecen.

Algunos científicos sostienen que estos cambios pueden deberse a la acumulación y liberación de gases en el subsuelo. La presencia de unos 500 géiseres en la región, que expulsan agua caliente y vapor de manera periódica, es otro indicio de la actividad volcánica latente.

Asimismo, el enjambre de sismos es una consecuencia natural de la existencia de una cámara magmática activa y de las fracturas en la corteza terrestre.

Desde una perspectiva turística, la caldera de Yellowstone ofrece un paisaje espectacular y desde lo geológico están monitoreando de manera constante debido a su gran extensión y al impacto potencial que una erupción podría tener en el planeta.

Si bien no hay evidencia concluyente de una erupción inminente, la vigilancia de su actividad sigue siendo crucial para prevenir cualquier escenario de riesgo mundial.

 

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD