La histórica ciudad portuguesa de Porto es tan mítica como la gran mayoría de las ciudades europeas que deslumbran a todos. Su belleza radica en las calles de esencia urbana pero con un toque de distinción que la hace diferente a las demás.
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La histórica ciudad portuguesa de Porto es tan mítica como la gran mayoría de las ciudades europeas que deslumbran a todos. Su belleza radica en las calles de esencia urbana pero con un toque de distinción que la hace diferente a las demás.
Cuenta con un patrimonio de raíces clásicas en Europa, que se traduce en un interesante centro urbano que cautivó y vio como ideal, Néstor Aguirre.
Es que motivado por lograr un crecimiento personal y profesional, este jujeño se trazó una meta hace un año atrás que lo llevó a trasladarse a este hermoso lugar en el mundo.
Junto a su esposa Lourdes y su pequeño perrito "Coquito", emprendieron el camino hacia la aventura compartiendo la travesía de disfrutar y hacer de sus sueños, realidades plenas.
"La idea siempre estuvo, con mi esposa veíamos que nuestro futuro estaba en otra nación. Nosotros estábamos bien en Jujuy, con trabajo. Pero el instante en que lo elegimos era ese y no otro", comentó Aguirre sobre su decisión.
Sin embargo, fue el resultado de toda una preparación sentimental y psicológica para los tres, porque significaría un cambio absoluto en sus vidas.
"Nos tomamos nuestro tiempo para trabajar este momento. Eso sí, seis meses antes lo hablábamos a 'Coquito' y lo metíamos en una mochila para que se acostumbre de a poco al viaje y que no sea estresante para él. De Jujuy hasta llegar a Portugal no fue directo, fuimos por Colombia y España antes de llegar", expresó.
Pisar el viejo continente significó un cambio intenso para la pareja de jujeños que, junto a su pequeño animal; tuvieron las mejores expectativas desde el instante previo de su arribo a la ciudad.
El impacto cultural, fue especial ya que desde el idioma tuvieron que saber adaptarse. "Como tenía algo claro sobre el portugués, en verdad lo subestimé pero en la comunicación es importante saberlo hablar para entablar un diálogo ameno", indicó.
Al compartir su experiencia, el profesor de Educación Física se sintió orgulloso de trabajar en un hotel cinco estrellas para lograr estabilizarse y sostener su hogar.
"Soy un repositor que supervisa las actividades del personal en el hotel donde estoy desde hace tres meses", aclaró Aguirre, agradecido por estar en suelo europeo.
Y es que su anhelo se está cumpliendo y es el poder conocer esta cultura que lo maravilla como cual cajita de sorpresas. "Lo que me llamó la atención es que es una ciudad muy turística, vienen visitantes de todo el mundo y es permanente el movimiento", explicó el jujeño que si bien le gusta su nuevo presente, no olvida su historia en la tierra que lo vio nacer. Es que Jujuy tiene un encanto que traspasa fronteras y él sabe valorarlo desde la distancia. "A mis compañeros de trabajo y a las personas que me preguntan de dónde soy, les digo que del norte argentino y les muestro fotos de nuestros cerros, se enloquecen con la cultura que tenemos", aseguró el profesor que cada día aprende más sobre la idiosincrasia de la que ahora es parte.
