Cuando los detectives descubren el lugar al que fue la cantante para llevarle diez mil dólares a su extorsionador, el malviviente le cuenta que perdió la voz, de una cuchillada en la garganta, por defenderla. Sabemos que su dolor es el de no haber podido seguir su carrera artística y los detectives buscan la forma de reducirlo, entonces el interés de Solón ya se había desvanecido.
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Cuando los detectives descubren el lugar al que fue la cantante para llevarle diez mil dólares a su extorsionador, el malviviente le cuenta que perdió la voz, de una cuchillada en la garganta, por defenderla. Sabemos que su dolor es el de no haber podido seguir su carrera artística y los detectives buscan la forma de reducirlo, entonces el interés de Solón ya se había desvanecido.
Volvió a la carne al horno como olvidado de la serie que mirábamos en la televisión. Las series debieran terminar cuando se resuelve el caso, dijo mientras masticaba. La intriga anterior es la parte importante porque en ello radica la lógica de una serie policial. El resto, que es pelear, correr, disparar, parapetarse y vaya a saberse qué más para atraparlo, son sólo cuestiones de acrobacia.
A mí me interesaba porque se conjugaban con una partitura de jazz latino que sostenía la tensión, pero era cierto que saber si lo atrapan había pasado a un segundo plano. Aurelia convino en que de todos modos sabemos que los protagonistas de la serie van a triunfar.
El otro puede morir, pero para ellos siguen vaya a saberse cuántos capítulos más, nos dijo.
Estas series enseñan mucho, dijo Bautisto Solón como corolario y no alcancé a saber si servían para seguir ayudando al comisario Pierro en sus casos pueblerinos, o pensaba que lo hacían en un sentido más general, que nos vuelven más inteligentes. Las series de televisión son para nosotros como para otros tiempos pudieron haber servido las obras de Shakespeare, concluyó a los postres.