La Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju) lanzó un innovador proyecto de descarte de yerba mate y residuos orgánicos para promover el compostaje. Esta iniciativa busca gestionar los residuos biodegradables generados y llevar los restos de yerba mate, para su posterior compostaje en el campo experimental de Severino.
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La Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju) lanzó un innovador proyecto de descarte de yerba mate y residuos orgánicos para promover el compostaje. Esta iniciativa busca gestionar los residuos biodegradables generados y llevar los restos de yerba mate, para su posterior compostaje en el campo experimental de Severino.
"La intención es que esta iniciativa no solo tenga un impacto ecológico, sino que también mejore la gestión ambiental y de residuos orgánicos dentro de la institución. Queremos fomentar la higiene, promover el reciclaje, impulsar el compostaje y producir abono en Severino", explicó la decana de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju), Noemí Bejarano.
El objetivo es reducir el impacto ambiental y fomentar prácticas sustentables dentro de la facultad, por lo que se puso en marcha el Proyecto Institucional de Descarte de Yerba mate y residuos Orgánicos. Por eso, desde ayer, se comenzaron a ver en los pasillos de la facultad unos recipientes señalados con afiches sobre la campaña, indicando que allí se debe depositar los restos de yerba mate, de consumo común en la facultad.
Sucede que esta propuesta invita a la colocación de contenedores exclusivos para residuos orgánicos en puntos estratégicos del edificio, en el ala vieja del establecimiento y en cada piso, desde donde se prevé que los recolecten diariamente. Estos residuos serán trasladados al campo experimental Severino, donde se iniciará el proceso de compostaje para producir abono natural, que se reutilizará en el mantenimiento y mejora del suelo de los espacios verdes institucionales.
La decana de la facultad, Noemí Bejarano, explicó que esta acción busca ser "una propuesta ecológica integral, que no solo gestione los residuos de forma responsable, sino que también mejore la higiene institucional, promueva el reciclado y revalorice los desechos orgánicos como recursos".
Explicó que surgió porque el descarte inadecuado de yerba mate se había convertido en un problema de higiene, ya que al ser un residuo húmedo, provocaba derrames en bolsas y contenedores, generando malos olores y condiciones insalubres.
Este proyecto responde a esa problemática, y se alinea además con varios Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como el ODS 12, 13, 15 y 11; y con los principios de la Ley Yolanda, que promueve la educación ambiental en todos los niveles del Estado.
La iniciativa cuenta con la participación activa de estudiantes, docentes, no docentes y egresados, quienes se inscribieron previamente como voluntarios para colaborar en la recolección, monitoreo y sensibilización.
Además, se prevé impulsar campañas de comunicación y formación para fortalecer el compromiso de la comunidad académica.
Mediante este sistema de recolección y compostaje, la Facultad de Ciencias Agrarias apunta a continuar con su apuesta por acciones sostenibles y busca cuidar el entorno, según explicó la decana.