Con gran fervor, la feligresía de la parroquia San Pedro de Río Negro participó de la festividad de Corpus Christi que se vio engalanada con la presencia de los niños de la catequesis que revestidos de angelitos acompañaron el paso de la procesión con el Santísimo Sacramento y la celebración central. Alrededor de plaza General Belgrano, fueron dispuestos los monumentos preparados por las diferentes comunidades de la parroquia, ornamentados con signos propios de la celebración y custodiados por niños y familias que se congregaron para vivir la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
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Con gran fervor, la feligresía de la parroquia San Pedro de Río Negro participó de la festividad de Corpus Christi que se vio engalanada con la presencia de los niños de la catequesis que revestidos de angelitos acompañaron el paso de la procesión con el Santísimo Sacramento y la celebración central. Alrededor de plaza General Belgrano, fueron dispuestos los monumentos preparados por las diferentes comunidades de la parroquia, ornamentados con signos propios de la celebración y custodiados por niños y familias que se congregaron para vivir la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Desde el templo, procesionalmente se dirigieron al primer monumento ubicado en la esquina de Sarmiento y Mitre donde el padre Daniel Alberto Baca dio la bienvenida a los abanderados y escoltas de la escuela primaria "Juan XXIII" y los colegios "San Agustín", "Jesús Maestro", "Populorum Progressio" y del grupo scout "San Francisco de Asís" y a los integrantes de la Banda de Música de Juvenil de la Policía de la Provincia.
Previo a la entonación del Himno Nacional Argentino, el sacerdote recordó a los héroes que forjaron la patria gestada en la fe. "Tanto el pueblo como los padres de la patria, Belgrano y San Martín, han estado muy unidos a la eucaristía, en su camino para construir esta Nación justa, libre y soberana", dijo.
En cada uno de los monumentos, las reflexiones y la oración comunitaria hicieron centro en la misión a la que está convocada la diócesis, en el marco de los 90 años de siembra en los caminos de la fe y que insta a la presencia, el amor, el caminar y a salir a anunciar ese amor.
El párroco sostuvo que la eucaristía es el centro de toda la vida de la Iglesia. "Ese alimento nos da vida, nos da al mismo Cristo que se hace presente en nosotros".
