El juicio oral y público que se le sigue al exsacerdote Ricardo Oscar Quiroga, conocido como "padre Cocó", y a otras dos personas acusadas de abusar sexualmente de una niña de diez años en la casa parroquial de la ciudad de El Carmen en 2020, llegó a su etapa final y el próximo martes se producirán los alegatos y se dará lectura a la parte dispositiva del fallo.
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El juicio oral y público que se le sigue al exsacerdote Ricardo Oscar Quiroga, conocido como "padre Cocó", y a otras dos personas acusadas de abusar sexualmente de una niña de diez años en la casa parroquial de la ciudad de El Carmen en 2020, llegó a su etapa final y el próximo martes se producirán los alegatos y se dará lectura a la parte dispositiva del fallo.
En la audiencia celebrada días atrás, en el tercer piso del Palacio de Tribunales, uno de los imputados, Leandro Jesús Alberto Torres Barroso, solicitó declarar ante los jueces.
En 2020 el imputado tenía residencia en la ciudad de Monterrico y, según sus dichos, asistía a las tareas de la iglesia desde 2016, manifestó que conocía a "padre Cocó" Quiroga por su figura pública y anteponiendo que cuenta con estudios universitarios, negó los graves hechos por los que viene acusado.
Si bien la requisitoria fiscal establece un horario estimativo en que ocurrieron los hechos, el imputado le dijo al Tribunal que se encontraba en su casa estudiando y que luego se fue a almorzar a la casa de sus suegros.
Hay que recordar que Torres Barroso fue detenido luego de que la víctima lo reconociera en una rueda fotográfica y la niña no dudó en indicar quien fue su atacante, junto al exsacerdote.
Durante la investigación penal preparatoria, la niña había sido entrevistada en Cámara Gesell y describió la fisonomía del imputado, por lo que de inmediato se promovió acción penal y quedó detenido.
En las audiencias, Torres Barroso se muestra muy activo, dialoga constantemente con sus abogados defensores y en su anotador escribe todo lo que pasa en el recinto.
Muy por el contrario, "padre Cocó" Quiroga se mantiene con la cabeza gacha y los dedos cruzados, casi abstraído de lo que sucede en la sala de audiencias del tercer piso del Palacio de Tribunales.
Por otra parte, nuestro diario supo que con los elementos probatorios que obran en el expediente judicial, el Ministerio Público de la Acusación solicitó la elevación a juicio y con la recepción de pruebas testimoniales que se ventilaron durante las audiencias del debate oral, tanto el fiscal de Cámara Rodrigo Fernández Ríos como la querella adhesiva representada por Jorge Cesar Toconás, en la producción de sus alegatos, solicitarán condena ejemplificadoras para los presuntos coautores materiales y para la joven imputada de ser partícipe necesario.
Podría ser el primer cura condenado en Jujuy
Ricardo Oscar “padre Cocó” Quiroga podría convertirse en la primera figura de la Iglesia católica de Jujuy en ser condenado por un hecho de abuso sexual. Quiroga llega a estas instancias judiciales acusado de la presunta coautoría de “abuso sexual con acceso carnal doblemente calificado por ser cometido por dos personas y por ser miembro de un culto religioso y corrupción de menores agravado por la edad de la víctima en concurso real”. Los otros imputados son Leandro Torres Barroso, quien está acusado de “abuso sexual con acceso carnal doblemente calificado por ser cometido por dos personas y corrupción de menores agravado por la edad de la víctima en concurso real”, y una joven acusada de ser la presunta entregadora de la niña.
Según la requisitoria fiscal, el 24 de octubre de 2020, la joven imputada habría llevado a una niña de diez años a la casa parroquial ubicada en el centro de la ciudad de El Carmen. Allí la habría dejado junto al imputado “Cocó” Quiroga, quien habría golpeado a la niña y luego la llevó hasta uno de los dormitorios del inmueble donde perpetró el abuso sexual. Luego ingresó el otro acusado, quien también abusó de la niña, en presencia de la joven.
Al día siguiente, la joven junto a la víctima fueron al domicilio donde se perpetraron los abusos y en el lugar, “padre Cocó” Quiroga le entregó a la mujer la suma de mil pesos y un papel que decía “te doy $ 1.500 por tener relación contigo otro día, pensalo bien”, para luego retirarse del mencionado domicilio.
