Este año El Premio Ledesma a las Artes Visuales, realizó Ciclo de Reflexión y Experimentación en Arte Contemporáneo, en varios encuentros, para artistas jujeños, que concluyó la semana pasada con una instancia de premontaje, en las instalaciones del Centro Cultural Culturarte de la capital jujeña.
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Este año El Premio Ledesma a las Artes Visuales, realizó Ciclo de Reflexión y Experimentación en Arte Contemporáneo, en varios encuentros, para artistas jujeños, que concluyó la semana pasada con una instancia de premontaje, en las instalaciones del Centro Cultural Culturarte de la capital jujeña.
La capacitación se extendió a lo largo de este año, y finalizará con una muestra que está agendada para abrir la temporada de exposiciones de este espacio, en 2025, organizada por la empresa Ledesma y el Centro de Visitantes Ledesma.
El viernes último, los artistas que participan de esta experiencia, cumplieron con el último encuentro del Ciclo de Reflexión en Arte Contemporáneo. Se reunieron en Culturarte para presentar sus avances, intercambiar ideas y perfilar lo que será la muestra de cierre.
Este cierre no es solo un balance, sino un paso decisivo hacia la materialización de los proyectos que se gestaron en un espacio de intercambio y aprendizaje que reunió a talentosos artistas y un prestigioso jurado.
Los artistas que participan de esta experiencia que se concretó en el marco del Premio Ledesma, fueron especialmente seleccionados a partir de proyectos presentados. Ellos son Adriana Lugones, Alejandro López, Carolina Franco, Cecilia Espinoza, Florencia García Otta, Julieta Caorlin, Miguel Ángel Castro, Misky Mayo, Sergio Zago, Vilma Quiroga, Abel Mamani y Juan Pablo Ramírez.
La selección de los artistas fue realizada por un jurado evaluador en virtud de los objetivos planteados.
Los tutores a cargo de la formación son Ana María Battistozzi, Cecilia Quinteros Macció y Carlos Gómez Centurión.
Leonor Calvó, directora del Centro de Visitantes Ledesma, donde se realizaron algunos encuentros presenciales del ciclo, comentó en conversación con nuestro diario que la intención fue "ampliar la formación y acompañar a los artistas en los procesos creativos de una obra, que previamente había sido seleccionada por el jurado, como proyecto. Durante estos encuentros se realizaron diferentes tipos de actividades para llegar a un argumento conceptual potente que sostenga la obra".
Y contó que también contaron "con la ayuda muy generosa por parte de artistas plásticos como Carlos Gómez Centurión o Andrés Paredes, que son grandes artistas de proyección internacional, que estuvieron interviniendo también en este ciclo".
"A veces los desafíos de los artistas, tienen que ver con cosas prácticas" comentó Calvó, "y en esto, la experiencia de grandes artistas que ya han llevado su obra a grandes centros y otros niveles, realmente les significan un importante aporte a los artistas locales", continuó.
Y esta instancia (la del viernes) en especial, que fue un reconocimiento del espacio donde se va a exponer, ver cómo queda la obra en ese espacio y lo que necesitarán para concretar la muestra en las mejores condiciones, "es llevar la obra al lugar, presentarla, pero no dos días antes del montaje, cuando ya no hay muchas posibilidades de hacer modificaciones, sino con el tiempo necesario. Nosotros, que lo estamos haciendo tres meses antes de la muestra, vamos a poder realizar ajustes, que tienen que ver con la sala, con la obra. Se llama ensayo curatorial o premontaje".
Estuvieron presentes en esta instancia las curadoras Battistozzi y Quinteros Macció, junto a los artistas y al equipo de montaje de Culturarte.
Tras la selección, los encuentros se hicieron en el Centro de Visitantes Ledesma y otros virtuales.
Curadora
Ana María Battistozzi, una de las prestigiosas curadoras, también conversó con nuestro diario. "La idea de Ledesma, fue que, después de haber auspiciado en varias ediciones de un premio de pintura, pensar un ciclo de reflexión sobre el arte contemporáneo dirigido a artistas jujeños. Y este ciclo implicó una serie de reuniones a lo largo del año, donde cada uno presentó los trabajos que venían haciendo, fuimos discutiendo, porque el ciclo implicaba pensar, qué estaban haciendo, cómo se conecta con el sistema de arte contemporáneo en general".
Y se explayó: "era tratar de darles soluciones técnicas, para que tengan otro desarrollo las obras, desde aprender a presentar proyectos".
Sobre esta instancia explicó que "lo que estamos haciendo hoy es como un ensayo general, para muestra real que va abrir en marzo del año que viene".
Artista
Misky Mayo, escultor, uno de los artistas que realizó el ciclo, explicó que "en este ciclo, pudimos ver nuestro recorrido personal en lo que estamos trabajando, aprendiendo a fundamentar lo que estamos haciendo. A mí en lo personal, me sirvió muchísimo para poder seguir trabajando en la parte conceptual de mi obra. A veces los artistas no estamos acostumbrados a escribir para conceptualizar nuestro trabajo".
Y continuó: "En mi caso, recorrí mi historia, tengo un abuelo carpintero, un papá escultor, y yo pude fusionar a los dos, en un mueble escultórico. Hice una unión de una herencia. Se abrió una ventana enorme, y a partir de ahora, la mayoría de mis esculturas van a ser con este toque".
"En esta clínica encontré mi línea de trabajo", dice. "Mi obra en este caso es una mesita con forma de llama, siempre traté de relacionar mi trabajo con mi lugar, mirando qué me puede dar la naturaleza a mi creación. Que se algo funcional, invita al espectador a tocarla", concluyó.
