El 2024 fue un año marcado por la activa participación ciudadana, tanto en las calles como en los espacios digitales, consolidándose como un eje central en el debate público. Desde estudiantes universitarios hasta trabajadores, mujeres y disidencias, la sociedad jujeña alzó su voz en torno a temas cruciales para el desarrollo del país y la provincia.
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El 2024 fue un año marcado por la activa participación ciudadana, tanto en las calles como en los espacios digitales, consolidándose como un eje central en el debate público. Desde estudiantes universitarios hasta trabajadores, mujeres y disidencias, la sociedad jujeña alzó su voz en torno a temas cruciales para el desarrollo del país y la provincia.
Uno de los sectores más dinámicos fue el estudiantil. Los jóvenes lideraron movilizaciones que reabrieron el debate sobre la necesidad de un financiamiento acorde para las universidades públicas, destacando instituciones como la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu). Estas manifestaciones incluyeron marchas, asambleas y propuestas innovadoras, reafirmando la autonomía universitaria como un pilar esencial de la libertad académica.
El financiamiento universitario y la inclusión de perspectivas diversas en los programas educativos fueron ejes centrales. Los estudiantes se posicionaron firmemente contra medidas que amenazaban la independencia de las casas de estudio, poniendo de manifiesto la importancia de una educación pública inclusiva y de calidad.
Los trabajadores de diferentes ámbitos protagonizaron protestas significativas. Estas movilizaciones, centradas en la necesidad de mejorar las condiciones laborales, pusieron de relieve el impacto de la inversión pública como motor económico y social.
Las calles de Jujuy se llenaron de manifestaciones en favor de los derechos de las mujeres y las disidencias. Las demandas incluyeron el fortalecimiento de los centros integrales de género, el cumplimiento efectivo de la Ley Micaela y políticas públicas destinadas a erradicar la violencia de género. Estas movilizaciones reflejaron un compromiso creciente de la ciudadanía con la construcción de una sociedad más equitativa.
Paralelamente, el ámbito digital se consolidó como un espacio fundamental para la participación ciudadana. Las plataformas de El Tribuno de Jujuy —incluyendo Facebook, Instagram, X, YouTube— se transformaron en foros de intercambio y reflexión sobre los desafíos que enfrenta la provincia.
A través de estas redes, se amplificaron debates sobre el cuidado del medio ambiente, el uso de los recursos públicos y los derechos laborales. Las publicaciones generaron miles de interacciones, mostrando la importancia de las redes sociales como espacios para la construcción de un diálogo crítico y plural.
En un contexto de sobreinformación, El Tribuno de Jujuy reafirmó su compromiso con un periodismo que informa y acompaña el cambio social. La construcción de una comunidad activa y participativa fue uno de los logros más destacados del año.
Construcción
El 2024 dejó una enseñanza clara, que la participación ciudadana, en sus múltiples formas, es el motor del cambio. Tanto en las calles como en los espacios digitales, la sociedad jujeña demostró que la democracia se construye día a día, con acciones, debates y un compromiso con el futuro. También quedó claro el rol indispensable de los medios de comunicación en el fortalecimiento de la democracia. A través de una cobertura responsable, crítica y en tiempo real, se promovió el acceso a la información, permitiendo que los jujeños y las jujeñas estuvieran mejor informados.