PURMAMARCA (Corresponsal). La República de Santa Anita se lució en el pueblo de los siete colores con una feria que se realizó al costado de la plaza 9 de Julio donde se expusieron distintos productos en miniatura elaborados por varias instituciones del pueblo que participaron la mañana del miércoles. La celebración en honor a la patrona de las mujeres, los mineros y quien fuera para la iglesia católica, la abuela de Jesús, fue organizada por la Asociación Purmamarca y contó con la colaboración del municipio y comunidades.
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PURMAMARCA (Corresponsal). La República de Santa Anita se lució en el pueblo de los siete colores con una feria que se realizó al costado de la plaza 9 de Julio donde se expusieron distintos productos en miniatura elaborados por varias instituciones del pueblo que participaron la mañana del miércoles. La celebración en honor a la patrona de las mujeres, los mineros y quien fuera para la iglesia católica, la abuela de Jesús, fue organizada por la Asociación Purmamarca y contó con la colaboración del municipio y comunidades.
Los niños acompañados de sus padres y demás familiares hacían fila para poder entrar a la pequeña ciudad donde en primer lugar debieron registrarse y adquirir su documento válido para transitar libremente, ya que de lo contrario y tal como les sucedió a varias personas fueron a parar a la cárcel de Santa Anita.
Entre esos momentos de diversión, muchos aprovecharon para recorrer los puestos de venta con productos en miniatura donde instituciones como la Asociación Purmamarca, la comunidad indígena de Chalala, la comunidad originaria de Coquena, la comunidad de Tumbaya, la cooperadora de la escuela primaria N´ 21 y productores gastronómicos ofrecieron una diversidad de comidas y artesanías de un tamaño pequeño.
Vecinos y turistas degustaron entonces tamalitos, empanaditas, platitos de locro, empanadillas, maicenitas, tortitas, alfajorcitos, y también los chicos fueron en busca de la ropita para sus muñecos, todo ello después de cambiar el dinero en efectivo por plata válida para comprar en la República.
En el registro civil se realizaron varios divorcios pero también matrimonios, ya que parejas del pueblo y turistas decidieron contraer matrimonio para ponerse bajo la protección de Santa Anita y dieron el sí con los cerros de colores como testigos para luego bailar el vals ante el paisaje purmamarqueño.
Sobre esta tradición en el pueblo, Lucinda Cruz, presidente de la Asociación Purmamarca, expresó que "la feria se realiza hace varios años aquí en la plaza, antes estaba a cargo de la escuela y este año decidimos organizarla para que no se pierda esta tradición de festejar a Santa Anita, con pequeñas piezas en miniatura”.
