El grupo yihadista Estado Islámico golpeó el corazón de la localidad siria de Al Qaryatain, símbolo de la coexistencia interreligiosa, secuestrando a 230 civiles musulmanes y cristianos, un día después de hacerse con su control. Son 170 sunitas y más de 60 cristianos acusados de colaborar con el "régimen".
El grupo yihadista Estado Islámico golpeó el corazón de la localidad siria de Al Qaryatain, símbolo de la coexistencia interreligiosa, secuestrando a 230 civiles musulmanes y cristianos, un día después de hacerse con su control. Son 170 sunitas y más de 60 cristianos acusados de colaborar con el "régimen".