Un espacio amplio, con un clima ameno, con estantes con libros, paredes con las improntas de Ariel Cortéz y Juan Manuel Taritolay en reflejos de las cuatro regiones jujeñas y, al fondo presidiendo el escenario, la imagen de la "mamita María", son los condimentos visuales que reciben a quien ingresa a "Viva Jujuy", la peña que se ubica en un barrio emblemático para la cultura como lo es Villa Gorriti. Poetas y músicos famosos y aún recordados poblaron sus calles, cantaron a su gente y escribieron reflejando, por ejemplo, la tranquilidad de un domingo (lo hizo Néstor Groppa).
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Un espacio amplio, con un clima ameno, con estantes con libros, paredes con las improntas de Ariel Cortéz y Juan Manuel Taritolay en reflejos de las cuatro regiones jujeñas y, al fondo presidiendo el escenario, la imagen de la "mamita María", son los condimentos visuales que reciben a quien ingresa a "Viva Jujuy", la peña que se ubica en un barrio emblemático para la cultura como lo es Villa Gorriti. Poetas y músicos famosos y aún recordados poblaron sus calles, cantaron a su gente y escribieron reflejando, por ejemplo, la tranquilidad de un domingo (lo hizo Néstor Groppa).
El jueves pasado, la invitación a disfrutar del espacio y su espectáculo, fue para prensa, funcionarios del área de turismo entre ellos el secretario de Turismo de la Provincia Diego Valdecantos; y representantes de instituciones empresariales.
Oficialmente, la peña- café- espacio literario, se inauguró el viernes con la presencia de Pitín Zalazar (exintegrante de Las Voces de Orán y uno de los mejores intérpretes de la zamba "La 7 de abril") con entradas agotadas, pero antes fue el tiempo de muchos jujeños de descubrir el encanto de un lugar en el que la recepción estuvo a cargo de Gustavo "Bacha" Bouhid dando la bienvenida y explicando la iniciativa de cubrir la mística de un espacio en el que la danza, el canto, la música, las palabras toman vuelo. Junto a Bouhid, se encuentra José Atié encargándose de la logística.
El staff conformado por el multifacético Elías Abalos y José Simón, se conjuga logrando un espectáculo integral como elencos estables de músicos dirigidos por el maestro Javier Soria, que se completa con el ballet que dirigen Ivana Angola y Atuel Calderón, quienes logran el aplauso espontáneo del público en cada una de sus apariciones, no sólo por su profesionalismo al momento de la música, la danza o del malambo femenino y masculino, sino por el carisma de sus bailarines en el caso del ballet, y por los eximios músicos, en el caso del grupo.
"Tacita de Plata", la hermosa zamba que nos identifica a los citadinos, escrita por los santiagueños hermanos Simón (enamorados de nuestro valle) en la voz sentida de José Simón, inauguró la velada que se tornó amena con los relatos que fueron anticipando los temas. Así contó la historia del "himno" "Para Santa Catalina", una cueca de Arsenio Aguirre que en los '60 llegó a nuestra Puna y captó en sus palabras la poesía que hay en sus paisajes y su gente y el de la "Zamba a Lozano", que el Cuchi Leguizamón y Miguel Ángel Castilla hicieron para homenajear en su cumpleaños a "La niña" Yolanda Pérez de Carenzo (el próximo 16 de febrero se celebrará un año más de su natalicio). Ese fue el momento en el que el cantor humahuaqueño, invitó al "Bacha" a cantar.
Acordeón en mano, quien hasta ese momento ofició de maestro de ceremonia, trasladó a los presentes a la algarabía de la música quebradeña. Huaynos, carnavalitos fueron sucediéndose con la llegada de los diablos que siempre son el sello cuando la música quebradeña alegra los corazones.
Debemos destacar que, en casi tres horas de espectáculo, el escenario nunca se quedó desierto ya que al canto le fue sucediendo la danza y así hasta el cierre final con toda la alegría que imprime nuestra música.
Con la peña abierta al público, se dio naturalmente un broche de oro impensado con la presencia del cantante lírico jujeño Roy Pullen Llermanos, que con voz impecable cantó "Clavelito Blanco" del querido y recordado Coyita Mercado, acompañado por Fadel Temer en guitarra, y entre otros temas, una versión "a capella" del temazo de Horacio Ferrer y Astor Piazzolla "Balada para un loco".
"Viva Jujuy", que anoche contó con la actuación de Tomás Lipán, presentará una cartelera abierta a artistas locales y nacionales, con el abrazo de los grupos estables que pocas veces se ve en un lugar de estas características.