Aunque parezca demasiado temprano, hay que comenzar a analizar el tiempo electoral que se avecina. Para los jujeños, será muy importante no perder de vista las actitudes y el pensamiento de los dos protagonistas políticos excluyentes del año: el gobernador Carlos Sadir y el presidente Javier Milei. Cuando el libertario necesita marcar la cancha, no se cuida ni con los ataques ni con los insultos, caiga quien caiga. Por ejemplo, arrecia con el desagradable ensañamiento montado por el "triángulo de hierro", tragicomedia de un bullying tan lamentable como peligroso, aparentemente orientado a forzar el alejamiento de su compañera de fórmula Victoria Eugenia Villarruel, (la vicepresidenta que a pesar de todo le pisa los talones en todas las encuestas de imagen, y en algunas le gana).
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Aunque parezca demasiado temprano, hay que comenzar a analizar el tiempo electoral que se avecina. Para los jujeños, será muy importante no perder de vista las actitudes y el pensamiento de los dos protagonistas políticos excluyentes del año: el gobernador Carlos Sadir y el presidente Javier Milei. Cuando el libertario necesita marcar la cancha, no se cuida ni con los ataques ni con los insultos, caiga quien caiga. Por ejemplo, arrecia con el desagradable ensañamiento montado por el "triángulo de hierro", tragicomedia de un bullying tan lamentable como peligroso, aparentemente orientado a forzar el alejamiento de su compañera de fórmula Victoria Eugenia Villarruel, (la vicepresidenta que a pesar de todo le pisa los talones en todas las encuestas de imagen, y en algunas le gana).
El otro tema igualmente sonoro lo puso al gobernador de Jujuy, a elegir entre las categorías de loco o miserable según las decisiones políticas que adopte con respecto a la fecha de la elección intermedia en nuestra Provincia. "Es llamativo que los gobernadores dialoguistas no quieran acompañar al oficialismo en las elecciones nacionales y apuesten a despegarse para preservar su poder local" dijo Milei de los que desdoblarán las elecciones. Y agregó: "Qué loco, no se quieren alinear con el mejor gobierno de la historia. ¿No será que hay una cuestión miserable de cuidar la quintita?". Carlos tiene pensado, casi decidido, fijar fecha para las elecciones en Jujuy para el 4 o el 11 de Mayo, como Salta o San Luis.
Él es dialoguista, pero ni loco ni miserable, por querer cuidar su quintita, algo que ya mucho le costará. Como a todo gobernador, y con toda lógica, le interesa más ser cabeza de ratón, antes que cola de león. Especialmente de este león libertario al que no le cuesta desconocer ni amistades ni lealtades. Si Carlos Sadir logra una elección importante, aunque Jujuy sea pequeña en el concierto político nacional, consolidará su capacidad de mando y de negociación, antes que tener que obedecer ciegamente "a Buenos Aires".
Carlitos tiene por delante un año bravo. Deberá ordenar el turbulento tablero interno, maniobrando con autoridad y precisión, para intentar sostener la mayoría que hasta ahora lo acompaña cómodamente en la Legislatura. Tendrá que fortalecer a la UCR, reagrupar los más de 30 sellos de goma que se alinean en Cambia Jujuy, despedir a la sombra del PRO que aún se cobija entre sus pliegues. Y quizá deba aceptar que Lyder, el partido de la Ministra Isolda Calsina, reserva de buenos dirigentes y legisladores, emigre hacia LLA de la mano de la jefa nacional Patricia Bullrich. Y seguirá lamentando no haber cuidado y valorado mejor la sociedad con el peronismo de Primero Jujuy de Carlos Haquim hoy cercano al cordobés Schiaretti. Para colmo, un fuerte viento de frente sopla desde el propio radicalismo nacional que extravió la brújula, mientras muchos se disputan la conducción real del centenario partido. Si Carlitos y la UCR jujeña logran la hazaña de otro triunfo, será importantísimo saber quién sale segundo, y quien tercero.
Los Libertarios afirman que ganarán ellos. Según sus datos ya superaron la barrera de los casi 150 mil votos de octubre del 2023 y van otra vez por el primer lugar, y aunque la elección se desdoble, saben que la imagen inoxidable de Milei los protegerá y los empujará. Y están convencidos que colaboran con su proyecto el desgaste del gobierno radical y el extravío del peronismo. Para que eso ocurra, la ardua tarea del senador Ezequiel Atauche, el diputado Manuel Quintar y el legislador del Parlasur, Mario Nallar, será presentar candidatos que sorprendan, distanciados de "la casta", y que representen a todo Jujuy, rompiendo del círculo cerrado de la capital.
El peronismo se autoesmerila en el limbo de su aturdimiento. Camina en la oscuridad hacia una interna prevista para el 9 de marzo. Las últimas versiones indicaban un posible acuerdo para repartir la presidencia del PJ: un primer tramo para la senadora María Carolina Moisés y el siguiente para la diputada camporista Leila Susana Chaher, para que Carolina, desde el llano, arranque su campaña para ser gobernadora de Jujuy en el 2027. Así esquivarían la interna una vez más, "para evitar males mayores", pero volverían a caer en lo que los peronistas de Jujuy vienen tratando de evitar: que todo se cocine desde Buenos Aires, a espaldas de los 108 mil afiliados locales.
La incógnita es si todos aceptarían mansamente estos arreglos. El Frente Amplio del "Dingui" Palmieri, insiste en un espacio propio para ir por fuera. Los otros interrogantes: ¿Llegará a ver la luz en Jujuy el peronismo no K, "Hacemos" de Florencio Randazzo y Juan Schiaretti? Hay algunos exlegisladores peronistas que supieron tener aceitadas relaciones con "el flaco" cuando era ministro de Transporte y que ya fueron explorados para este año. El espacio especialmente juvenil "Jujuy tiene futuro" de Rodolfo Tecchi referenciado en Guillermo Moreno, ¿seguirá dentro del PJ o dejará pasar este turno esperando días más claros? Y los peronistas del Partido Blanco de los Trabajadores, de Alejandro y Carlos Daniel Snopek tampoco piensan en volver a la casona de la 19 de Abril. Tampoco se sabe qué dirección tomará "Gana Jujuy" el espacio que lidera el exgobernador Agustín Perassi. Otros jujeños que aún creen en el viejo proyecto de Sergio Massa, ¿tendrán éxito en sus pretensiones de un armado 2025? Y hay más agrupaciones y referentes importantes como el espacio de Jujuy Avanza, pensando que sería preferible intentar la vida propia antes que esperar de las muchachas presidentas, los mendrugos de un poder que se viene licuando día a día y aceleradamente, desde que llegó a Jujuy una inexpresiva intervención porteña. Lo del PJ, hoy, es una cuestión de supervivencia.
Volviendo al principio: el desdoblamiento de las elecciones parlamentarias es un hecho que ya seis provincias anunciaron y otras, entre ellas Jujuy, lo harían en breve. El tema es despegar las campañas. "Discutir temas locales" es la excusa, más lo real es ganar, conservar -o al menos perder poco- peso político. Y sobre todo rehuir de la polarización Libertarios/Kirchneristas. Ahora Milei sugirió al PRO, ir juntos para "arrasar al kirchnerismo", y hasta se correría de la "pureza libertaria" para que Mauricio Macri sea senador por Caba. Aún falta pulir el acuerdo. El cristicamporismo que parece sólo concentrado en no perder la Provincia de Buenos Aires, para convertirla en refugio y trinchera de la resistencia. Pero el gobernador Kicillof, sigue pensando desdoblar con lo que los planes K, estallarían por los aires.
Si no saben visualizar, interpretar y escapar de esta guerra de titanes, gobernadores, intendentes y legisladores, podrían quedar devastados por los impactos directos o por la lluvia de esquirlas que caerá desde La Quiaca a la Antártida. "No están considerando las preferencias de los electores. No pueden estar fastidiando a la gente todo el tiempo" arremete Javier, "eso de los tibios ya fracasó en la Argentina, ¿Por qué no piensan en los argentinos y en grande, en lugar de estar mirando la chiquita?", planteó. Pero Carlitos, no es ni tibio, ni loco, ni miserable, es un gobernador moderado, obligadamente pragmático, con muchos frentes abiertos alrededor de su sillón, que se prepara para enfrentar una tormenta perfecta.