Un policía que prestaba servicio de control y prevención protagonizó un inaudito hecho en la ciudad de San Pedro, cuando fue demorado por realizar sus labores con 1.20 g/l de alcohol en sangre.
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Un policía que prestaba servicio de control y prevención protagonizó un inaudito hecho en la ciudad de San Pedro, cuando fue demorado por realizar sus labores con 1.20 g/l de alcohol en sangre.
Un efectivo se percató del hecho cuando realizaba un control de rutina al personal afectado a la prevención de delitos.
Según establecieron fuentes que fueron consultadas por El Tribuno de Jujuy, el episodio se registró el pasado lunes alrededor de las 4 en inmediaciones de un establecimiento educativo ubicado en la intersección de la calle Puerto Argentino y Fernando Zarzoso del barrio Patricios de la ciudad ramaleña.
En esas circunstancias un efectivo policial realizó un control de servicio al personal designado a la prevención y control en distintos sectores pertenecientes a la Unidad Regional Dos y al momento de arribar al mencionado lugar, encontró a un uniformado que emanaba aliento etílico.
Ante dicha situación, solicitó de forma inmediata que otro efectivo suplantara en las labores al protagonista, quien fue trasladado a la Seccional 48º.
En la dependencia policial dieron intervención a personal de Seguridad Vial que una vez constituidos en el lugar, sometió al efectivo a un test de alcoholemia el cual arrojó resultado positivo con 1.20 g/l de alcohol en sangre.
Por tal motivo remitieron las actuaciones al ayudante fiscal zonal del Ministerio Público de la Acusación, quien solicitó que el protagonista quedara alojado en la dependencia policial en calidad de demorado y que se proceda al secuestro preventivo del armamento reglamentario que poseía.
Finalmente las actuaciones complementarias quedaron a cargo de la Seccional 48º, por disposición del agente fiscal.