Hace 15 años se despedía para siempre el escritor Andrés Fidalgo, justamente, en el Día del Amigo, muchos que lo conocimos y tratado podemos decir que el día de su partida le fue propicio. Andrés se caracterizó, además de otras valoraciones, por ser un "buen amigo". Cinco días antes, se despidió otro escritor, Miguel Ángel Pereira. Ambos de gran trayectoria en el campo de las letras de Jujuy, mantenían una relación de mucho tiempo atrás, se remontaba a fines de la década de los cincuenta, más exactamente el 13 de junio de 1957, fecha de creación de la entidad de los escritores locales, Sociedad Argentina de Escritores - Filial Jujuy. En el nacimiento de ese ámbito institucional, Miguel Á. Pereira fue uno de los que firmó el Acta Constitutiva Nº 1 y Andrés Fidalgo resultó secretario de la Junta Directiva y Jorge Calvetti, su primer presidente.
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Hace 15 años se despedía para siempre el escritor Andrés Fidalgo, justamente, en el Día del Amigo, muchos que lo conocimos y tratado podemos decir que el día de su partida le fue propicio. Andrés se caracterizó, además de otras valoraciones, por ser un "buen amigo". Cinco días antes, se despidió otro escritor, Miguel Ángel Pereira. Ambos de gran trayectoria en el campo de las letras de Jujuy, mantenían una relación de mucho tiempo atrás, se remontaba a fines de la década de los cincuenta, más exactamente el 13 de junio de 1957, fecha de creación de la entidad de los escritores locales, Sociedad Argentina de Escritores - Filial Jujuy. En el nacimiento de ese ámbito institucional, Miguel Á. Pereira fue uno de los que firmó el Acta Constitutiva Nº 1 y Andrés Fidalgo resultó secretario de la Junta Directiva y Jorge Calvetti, su primer presidente.
Por esas coincidencias, de las cuestiones temporales de nuestras vidas, vemos que dos nombres sobresalientes de nuestra cultura literaria se despidieron para siempre con cinco días de diferencia, hace 15 años, mientras en el entorno cotidiano la gente sólo hablaba del "día del amigo". Hoy lo recordamos a ambos creadores, como seres humanos preocupados por dejar huellas que trasciendan sus días, en sus obras y en sus actos. Quedan sus libros como testimonios de sus pensamientos y creaciones. También quedan, para todos aquellos que tratamos personalmente a ambos escritores, los momentos positivos que debemos recuperar como lo más importante que el ser humano deja para los demás, en esa búsqueda insomne de llegar a un mundo ideal, donde todas las personas se abracen solidarias y se reconozcan más allá de las diversidades e intereses materiales. Fidalgo y Pereira dejaron mensajes para la continuidad de la luz, en un paisaje creativo, donde las palabras escritas nos llevan a descubrir lo más profundo del drama humano, el sentido de su existencia y su finitud inexorable.
En consideración de que ambos amigos han sido Hombres de Letras y orgullo de nuestra tierra jujeña, son merecedores que los recordemos con sus propias palabras y por eso, de Andrés Fidalgo, elijo: "NOROESTE", "Esta tierra que mezcla los despojos / lavados, de celestes generales / con caídos al pie de ponchos rojos, / trató a los enemigos, como iguales. // De aquí se sigue levantando un viento / federal y unitario, entreverado. / La gloria junto a ellos tuvo asiento: // combatió un día para cada lado. / No lograron descanso ni en la muerte; / si extensa la pasión, corto el destino. // De tanta mano querenciosa y fuerte / ¿sólo esto queda, polvo en remolinos? / No: persiste lo intenso de sus vidas, / por verdades y errores, consumidas." y "LIED Nº 3", "Yo tuve dos alas: // Estela y Alcira. / Con ellas cruzaba / la noche o el día. // Crecieron con plumas / ligeras y alegres; / sombra para el sol, / calor en la nieve. // Aprendieron pronto / las leyes del vuelo / y solas se izaron / hasta su aire nuevo. // Quedé mutilado / a ras de la tierra, / falto de la gracia / que me daban ellas. // Una, casi Estela; / otra, toda Alcira. / Para mí, dos alas; / para otros, mis hijas."
También en este espacio, por el Día del Amigo, quiero dejar un testimonio directo del poeta Andrés Fidalgo. Era el 30 de enero de 1987 y ya había aparecido, durante 1986 la revista Capricornio Nº1 y 2, de mi creación, en su primera etapa. Vino a mi domicilio a dejarme un recuerdo por esa tarea literaria y me entregó un taco de impresión del artista Luis Pellegrini, para la revista Tarja y un libro de su autoría "Aproximaciones a la poesía", donde escribió: "Para Jorge Albarracín, amigo y poeta, con palabras de estímulo por su tarea en 'Capricornio' y, en general, en pro de la literatura jujeña. Jujuy, 30/01/87".
De Miguel Ángel Pereira, elijo de su libro "Otras páginas": Las quinientas notas dominicales de Néstor Groppa en el diario Pregón.
"Cual las hierbas de nuestros cerros, pequeñas y sustanciosas, humildemente acurrucadas en la página que termina con la letra-firma del autor, las notas de Néstor Groppa aroman de gracia el domingo literario de Pregón.
Poético historial traspasado de lirismo, cuya emotividad, tal las sensitivas del campo, se abre y cierra en un día, en una lectura, para recomenzar luego su puntual percepción semanal. Amante crónica de nuestro existir capitalino y suburbano, provincial a veces y cuando reflexiva, universal otras.
Enternecido recuento de hondas simplezas y trascendentes intrascendencias, que la emoción devela y el corazón valoriza, tasando inadvertidos quilates.
Sentimental compilación de lugares, modos, costumbres y nombres, que el atropellado presente pronto dejará empolvado de olvidos.
Solidario registro del alma y vida de los humildes nuestros, de los nacidos, venidos y radicados, que hicieron y hacen el San Salvador de las villas "posteriores a la historia".
Testimonio de amor a Jujuy, con raíz de permanencia, tronco de hogar, fruto de obra y florecer de hijos, que por quingentésima vez repite, tan sólo arrepentido de no haber dicho por día, lo mucho que la quería".
(Palabras en el álbum de homenaje al poeta Néstor Groppa, con motivo de completar quinientas notas dominicales en el Suplemento Literario del diario Pregón de Jujuy, el 14 de octubre de 1973)