Con la alegría aún brotando del corazón todavía emocionado por un triunfo anhelado, Leandro Chocobar Pantoja se coronó de gloria luego de atravesar sobre dos ruedas el circuito del Trasyunga - TY 2023 de mountain bike y obtener una de las medallas en la categoría MTB en pareja.
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Con la alegría aún brotando del corazón todavía emocionado por un triunfo anhelado, Leandro Chocobar Pantoja se coronó de gloria luego de atravesar sobre dos ruedas el circuito del Trasyunga - TY 2023 de mountain bike y obtener una de las medallas en la categoría MTB en pareja.
Pero no se trató de una carrera simple. Para este jujeño significó mucho más. Porque conllevó un esfuerzo que día a día le ofrendó a esta lucha por superarse y cerrar círculos, probándose a sí mismo que su sueño llegaría ser una dulce realidad, potenciadora de emociones y físico, en un nivel máximo.
Sin embargo, para concretar el sueño de alcanzar un objetivo en esta disciplina, las experiencias que viviría serían constantes en el camino a su meta.
"Soy de los bikers nuevos que iniciaron pospandemia luego de estar confinados y aprovechábamos con mi novia y mi hermano para salir a tomar aire y solcito, despejar la mente cuando todo parecía que explotaba en cualquier momento. Al tiempo y ya con más libertades, aprendí de un amigo, Javier Valero, nuevos caminos por sendas y algunos circuitos de mountain bike donde hubo todo un aprendizaje de técnicas de subidas, bajadas y sobre todo caídas y golpes", recordó "Leo", como le dicen sus amigos.
Así que fue un desafío ingresar a este mundo nuevo para el joven que con 36 años, siguió cumpliendo con el gran reto personal que persistiría con el paso del tiempo.
"Desde la vestimenta a las zapatillas y en la ´bici´ que con tantos ´x´ cambios andás mejor y las ruedas tubeless, al aprendizaje de cómo posicionar el cuerpo para bajadas empinadas y qué tanto bajar el pecho para trepar subidas, cada día era más emocionante", expresó Chocobar sobre su aprendizaje a través de una modalidad muy entretenida pero dura, al mismo tiempo. No obstante, el magnetismo que desde el inicio provocó en él las ganas de seguir en esta aventura, no dejó de encenderse cada vez más y esa chispa fue fuego que se avivó con más fuerza en su primera carrera. "Fue el Rally Tilquiza, 24km y los nervios a mil. Una largada con un ritmo muy fuerte y la sorpresa fue poder sostenerlo todo el tiempo", dijo emocionado. "Desde que me subí a una bici hasta esa carrera no había planeado estar en competencias y tan cerca de los más rápidos. Eso fue muy motivador", aseguró este joven que no dio nada por sentado y empezó a creer en su fuerza de voluntad para brillar más. Y es que fue una carrera que le abrió las puertas y la mente hacia nuevas posibilidades.
Participó en la categoría de promocionales "B" donde salió sexto. "Estando tan cerca del podio, íquería más!", reveló Chocobar sobre su performance. Movido por su deseo de realización personal, renovó la apuesta al año siguiente. "Ahí se asomó Trasyunga - TY 2021 y de unos amigos de La Mendieta (Cristian Aramayo y Enzo Díaz), cosechados en las carreras, sale la idea loca de correrla. Podíamos hacerla en 25km, pero fuimos por de 50km con casi 1.000 mts. de desnivel", comentó. "¿Cómo nos fue? De terror. Cristian enfermó días previos y corrí con Enzo más de 5 horas, después de los 20km, cuando llegamos ya estaban entregando premios por lo que nos marcaron ´DNF´" (Did not finish, indicador de que no habían terminado la carrera), contó.
"Nos prometimos correr los tres nuevamente mejor entrenados", dijo. Y entonces, con la mente puesta en visibilizar una nueva preparación ante el cambio de categoría a master "A", dio rienda suelta al proceso de otros extensos entrenamientos que, al final, dieron sus frutos. "Llegó el esperado podio en master en un XC Yala, durísimo. Y de ahí, la preparación para Trasyunga 2022 de febrero a julio, con entrenamientos de cinco a seis días por semana", comentó Chocobar, confirmando el cambio a una categoría por demás exigente. "Practicaba rutinas armadas escalonando intensidades hasta la fecha de competición. Y ahí apareció la desgracia, un accidente, una caída en pavimento cuando volvía a casa después de entrenar en barrio Los Perales. Tres días antes de correr ese TY 2022, me deja de saldo una fractura de clavícula, una lesión muy común en este deporte.
El hueso no consolidó pese a estar en fisioterapia y controles periódicos, tenía la clavícula separada", detalló el deportista. El stop por la lesión tuvo que llegar sí o sí para una recuperación completa. "Llevó tiempo rehabilitarme, me operan en diciembre más su tiempo de recuperación, donde el apoyo de la familia, amigos, profesionales y mi novia Lourdes fue lo que hizo que siga en pie", explicó el biker. Así es que con el inicio de 2023, las ilusiones que no habían desaparecido del todo volvieron a restablecerse gracias a dos amigos. "Este TY2023 no iba a correr, porque no iba a llegar, pero ante la llamada de dos locos (Cristian Javier Aramayo y Enzo Jesús Díaz) a los que no les pude decir que no, empecé manos a la obra", indicó este jujeño que logró su sueño sin dejarse vencer ante las adversidades e instó a los jóvenes a perseguir sus sueños porque todo es posible.