El intendente de La Quiaca, Blas Gallardo, afirmó que si el Gobierno provincial garantiza el pago de los sueldos a los empleados de esa comuna hasta fin de año, "doy un paso al costado", reafirmando que se trata de una maniobra política para perjudicarlo por sus críticas al Ejecutivo jujeño.
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El intendente de La Quiaca, Blas Gallardo, afirmó que si el Gobierno provincial garantiza el pago de los sueldos a los empleados de esa comuna hasta fin de año, "doy un paso al costado", reafirmando que se trata de una maniobra política para perjudicarlo por sus críticas al Ejecutivo jujeño.
Hay que destacar que ediles opositores proponen la suspensión del jefe comunal, responsabilizándolo de la falta de pago de los haberes al haber tomado préstamos que ahora le está descontando el Gobierno provincial.
"El Gobierno de la Provincia, desde 2005, envía a todos los municipios los fondos para sueldos bajo dos conceptos: coparticipación y asistencia financiera. Esta vez, después de 42 meses que llevamos de gestión, dice que lo de asistencia financiera es un préstamo que nos hicieron y que ahora no lo mandan y que debemos devolverles", detalló el intendente. "Si esto fuera cierto, todos los municipios serían deudores y deberían cobrarles a todos. Pero no, quieren que solo La Quiaca devuelva ahora", agregó.
"Fuimos a reunirnos con funcionarios provinciales y no nos recibieron. Por eso venimos a mostrarles documentación que muestra que ellos mienten y no quieren enviar los fondos por una cuestión política", aseguró Gallardo en una reunión con delegados municipales y legisladores, precisando que el Gobierno solo envió este mes $50 millones, faltando otros $67 millones, es decir un 52% que el municipio no puede afrontar con recursos propios.
Expresó que está dispuesto a renunciar para "no mantener de rehén a los trabajadores".