En Jujuy se colocó por primera vez un dispositivo en el corazón denominado "Filtro de Watchman", con una técnica no invasiva que permitió evitar que una paciente, que no podía ser coagulada, tenga riesgo de un ACV que pudiera generarse a consecuencia de un coágulo que genera un fibrilación auricular. El procedimiento se hizo en pocos lugares del país y es una innovadora alternativa que se usa en países del primer mundo.
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En Jujuy se colocó por primera vez un dispositivo en el corazón denominado "Filtro de Watchman", con una técnica no invasiva que permitió evitar que una paciente, que no podía ser coagulada, tenga riesgo de un ACV que pudiera generarse a consecuencia de un coágulo que genera un fibrilación auricular. El procedimiento se hizo en pocos lugares del país y es una innovadora alternativa que se usa en países del primer mundo.
"En Jujuy se hizo un procedimiento nuevo, la colocación de un "Filtro de Watchman" en una de las cavidades del corazón. Es la primera vez que se hace en Jujuy, y es uno de los pocos lugares donde se realiza en Argentina", afirmó Pablo Clementti, uno de los jefes de Unidad Coronaria, quien junto a los médicos Alejandro Palazzo, jefe de Electrofisiología, y Fernando Tejerina, jefe de Hemodinamia, realizó el procedimiento.
Precisó que el "Filtro de Watchman" es un dispositivo que se coloca en la aurícula izquierda del corazón, tiene a su vez otra pequeña llamada orejuela donde se forman los coágulos. "Cuando aparece una arritmia, como la fibrilación auricular, puede generar coágulos dentro de esa cavidad, que si se desprenden del corazón viajan por el sistema y pueden causar un infarto cerebral o una embolia sistémica, que se tape alguna arteria de la pierna", dijo.
Palazzo explicó que la fibrilación auricular tiene dos componentes, los síntomas que produce la arritmia y el riesgo oculto de producir un accidente cerebro vascular. "Con éste dispositivo es una seguridad permanente para que el paciente no repita un episodio de ACV, en este caso que ya había tenido uno y no necesite la anticoagulación", agregó.
Clementti señaló que una contraindicación para la anticoagulación es la hemorragia, por lo que no se puede anticoagular a un paciente. Por ello el dispositivo que se colocó es la alternativa a esa limitación, para el cierre de la orejuela, porque la paciente que lo recibió tenía hemorragias repetidas y contraindicada la coagulación. Tiene una hemorragia digestiva, por divertículos en el colon, por lo que no se podía anticoagular, y siendo una paciente con riesgo alto de hacer un infarto cerebral u otra embolia sistémica, se decidió colocar el filtro.
Por su parte Tejerina precisó que se trata de un procedimiento de cardiología intervencionista, mínimamente invasivo. "Es muy novedoso, ya que en épocas pasadas había que hacerlo a través de métodos quirúrgicos, con un corazón a cielo abierto. Hacerlo por vía percutánea es una novedad muy importante", dijo. Detalló que se ingresa a través de la vena de la ingle, y mediante catéteres libera el dispositivo en el lugar especificado a través de mediciones que hacen en el procedimiento.
"El dispositivo nos ha llevado una hora en hacerlo, estuvimos asistidos por gente de Buenos Aires que nos ayudó en esta primera intervención en Jujuy", dijo Palazzo. Fue una operación simplificada en la que el paciente se quedó 24 horas en unidad coronaria y recién se pudo externar.
Planteó que es completo el tratamiento para la fibrilación auricular, y explicó que si bien tratan la arritmia en algunos pacientes logrando eliminarla, el riesgo inminente de hacer un ACV en ciertos casos continúa. Destacó por ello que con el dispositivo completan el perfil del tratamiento de esa enfermedad, que hasta no hace mucho tiempo era incurable.
Detalló que la arritmia aparece vinculada en ocasiones a factores genéticos o estilo de vida, con prevalencia elevada por la edad, ya que el 18% de la población de más de 70 años puede tener un episodio de fibrilación auricular. Se da en forma aislada, con crisis de palpitaciones o bien el ritmo normal se reemplaza por la fibrilación auricular: la aurícula deja de contraerse y esta arritmia hace que la aurícula lata tan rápido de modo que ya no lo haga. "Ese éxtasis sanguíneo o flujo alterado que se produce en la aurícula izquierda favorece la formación de coágulos, y de ésta manera evitaríamos que algunos pacientes, que no pueden recibir un anticoagulante, tenga riesgo de cardioembolia", finalizó Palazzo.