El romántico Betho Ramos está a punto de cumplir 50 años con la música. Hace música romántica, del recuerdo, de "aquellos" años, y hoy, acompañado por la tecnología, dice que trabaja con pistas, lo que le permite presentarse en cualquier ámbito y escenario.
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El romántico Betho Ramos está a punto de cumplir 50 años con la música. Hace música romántica, del recuerdo, de "aquellos" años, y hoy, acompañado por la tecnología, dice que trabaja con pistas, lo que le permite presentarse en cualquier ámbito y escenario.
Comenzó a cantar cuando estaba en su etapa estudiantil, en los encuentros de la Fiesta del Estudiante, y nunca más dejó. "Nunca hice un impasse en este camino, nunca dejé de cantar", cuenta.
Mientras conversamos, se está aguantando las ganas de cantar, y finalmente, al momento de la foto, le salió una estrofa de una de las canciones de Leonardo Favio. "Siempre fui solista, siempre me presenté con el nombre de Betho Ramos, con 'th'", aclara. "Mi propuesta musical es un homenaje a cantantes como Sandro, Palito Ortega, Leo Dan, Los Iracundos, Leonardo Favio, Salvatore Adamo, etc., ese es mi repertorio", comenta.
En la época en que yo era parte de las fiestas estudiantiles, no se escuchaba tanto folclore como ahora, por eso la tendencia de la música romántica", asegura,
Cuenta que es primo hermano de Adrián Chauque, de Adrián y Los Dados Negros, aunque no se ven con asiduidad, y tiene otros 'parientes' que se dedicaron a la música, por lo que supone una vena musical de familia.
Estudió música en el Club Independiente. Ahora aprovecha los cursos online, y las pistas que están disponibles gracias a la tecnología, para seguir entrenando. "Mi voz es un instrumento que yo tengo, pero lo tengo que mantener", dice.
Se manifiesta muy agradecido porque el año pasado tuvo Covid, y estuvo internado durante un mes, "pero por suerte no tengo ninguna secuela que afecte mis cuerdas vocales", así que, ahora más que nunca, Betho Ramos está vigente y dispuesto a seguir recorriendo escenarios privados, en conciertos, en teatros, en salas, o donde el público lo requiera.
