El presbítero Manuel Alfaro de la parroquia Santísimo Salvador de la Catedral se refirió a la aplicación del pase sanitario, medida que implementó días atrás la Provincia para poder ingresar a todo evento público y/o privado que represente una situación de mayor riesgo epidemiológico. El padre sostuvo que todavía no hay un comunicado oficial entre el Obispado de Jujuy y el Gobierno provincial para la implementación de esta medida en las iglesias.
inicia sesión o regístrate.
El presbítero Manuel Alfaro de la parroquia Santísimo Salvador de la Catedral se refirió a la aplicación del pase sanitario, medida que implementó días atrás la Provincia para poder ingresar a todo evento público y/o privado que represente una situación de mayor riesgo epidemiológico. El padre sostuvo que todavía no hay un comunicado oficial entre el Obispado de Jujuy y el Gobierno provincial para la implementación de esta medida en las iglesias.
En este marco resaltó que constantemente se les solicita a los fieles el cumplimiento de todas las medidas de bioseguridad vigentes para evitar contagios de Covid-19, como el correcto uso del barbijo, el distanciamiento social y la sanitización. Sin embargo, resaltó que hay algunas personas que no siempre cumplen con las normas de cuidado. Además, en este contexto de pandemia, brindó un mensaje de espiritualidad para todas las personas.
¿La Iglesia pedirá a los fieles la acreditación de esquema completo de vacunación Covid-19?
Todavía en la Diócesis de Jujuy, el obispado no emitió nada oficial, solamente un comunicado que hizo monseñor Daniel Fernández, para decir que todavía no está implementado, por lo menos, en las iglesias de las Diócesis y de la prelatura territorial de Humahuaca.
Si bien es cierto, a nivel nacional ha salido un comunicado desde el Gobierno, nosotros queremos aclarar a toda la gente que no vamos a exigir hasta el momento ningún pase sanitario, pero sí tenemos que colaborar con el cuidado de la salud de todas las personas que asistan a la iglesia. Tratamos de cuidarnos con la sanitización, les decimos a los feligreses que vengan a misa y que usen correctamente el tapaboca y cumplan con el distanciamiento.
O sea, colaboramos con este tema para que la gente se pueda cuidar. De todas maneras, lo ideal sería que nosotros podamos celebrar también en lugares abiertos. Siempre estamos recomendando a toda la gente que se cuide y que nos cuidemos entre todos, pero todavía no hay ningún tipo de exigencia con respecto al pase sanitario para que puedan entrar a rezar, o a participar de los sacramentos como por ejemplo, la santa misa.
En este contexto de pandemia, ¿cree que es necesario aplicar esta medida en las iglesias?
Yo creo que aquí tenemos que ser bastantes prudentes, porque esto está causando como una especie de polémica. Ha sido como el puntapié, sobre todo en Buenos Aires, algunos sacerdotes han contestado y no da para ninguna polémica.
Si es que el Gobierno con el Obispado, que son quienes hacen los convenios a través de la parte religiosa, ven conveniente el pase sanitario, vamos a acatar esta reglamentación.
Pero por el momento, nosotros permanentemente estamos haciendo la catequesis, antes, durante y después de cada sacramento, especialmente de cada misa, por ejemplo, aquí en la Catedral, que viene mucha gente, le damos la posibilidad de que puedan participar también desde el atrio de la iglesia, que es un lugar a cielo abierto, o sino también desde la recova y desde las galerías que tiene el museo propio de la iglesia Catedral. Creo que pensar en una obligación no sería prudente, pero si el Obispado nos los pide, vamos a tener que acatar la reglamentación.
¿Las personas que asisten a rezar o a las misas cumplen con los protocolos de cuidados?
Hay mucha gente que evidentemente respeta esto, pero también tenemos algunos fieles que se ponen medio reticentes y uno tiene que volver a repetir lo que permanentemente le pedimos. Los guías de alguna manera van monitoreando lo que significa cada celebración, permanentemente les están diciendo a las personas sobre los cuidados que deben cumplir.
A la mañana y a la tarde tenemos ministros de la Eucaristía, que están frente al santísimo sacramento, cuidando la iglesia y a la vez les están recordando permanentemente a los fieles.
Como digo, la mayoría sí respeta todas estas exigencias, pero hay algunos que por ahí se revelan y hay que ir con mucha caridad y repartirles las precauciones para que nos cuidemos entre todos.
Los años de pandemia fueron muy complicados para toda la población y el rol de la Iglesia, asistiendo a los fieles fue clave. Al respecto, ¿qué mensaje le brinda a la sociedad?
Me parece que esta pandemia ha causado realmente estragos, nosotros que atendemos espiritualmente, cuando la gente se confiesa va manifestando justamente que hay mucho dolor, mucha soledad y sufrimiento, fundamentalmente por la pérdida de los seres queridos durante este tiempo de pandemia. Nosotros tenemos nuestra misión como sacerdotes, religiosos y consagrados, de permanentemente predicar la esperanza y la alegría cristiana. No una alegría de jolgorio, sino la alegría de saber que la fe no se tiene que perder nunca, a pesar de los momentos complicados que estamos viviendo.
Y evidentemente, si uno ve el comunicado de los obispos que ha salido en estos días, los obispos de Argentina nos invitan a esto, a ir creando una patria de hermanos, a pesar de las injusticas y las corrupciones que existen.
Sin embargo, esperamos un país que pueda vivir fraternalmente. Ese es el mensaje que nosotros también tenemos que predicar.
Las misas de Nochebuena y Navidad son muy esperadas por las familias jujeñas que año tras año asisten a la iglesia...
La misa de Nochebuena que se realizará en la Catedral Basílica, el obispo monseñor Daniel Fernández la va a presidir el viernes 24, a las 20.30, porque tiene misas en la penitenciaria, en las cárceles y hospitales que celebra todos los años. Es la última misa que se celebra en la Catedral Basílica para bendecir a los pesebres que todos los años se centran en esta misa.