SAN PEDRO (Corresponsal). Anoche, el pueblo de La Esperanza se unió en oración para rogar por el eterno descanso del alma de los trabajadores fallecidos y para pedir fortaleza física y espiritual para los obreros y sus familias. La misa que se ofició en el templo Nuestro Señor de la Buena Esperanza, fue presidida por el obispo César Daniel Fernández y concelebrada por los sacerdotes de la Diócesis.
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SAN PEDRO (Corresponsal). Anoche, el pueblo de La Esperanza se unió en oración para rogar por el eterno descanso del alma de los trabajadores fallecidos y para pedir fortaleza física y espiritual para los obreros y sus familias. La misa que se ofició en el templo Nuestro Señor de la Buena Esperanza, fue presidida por el obispo César Daniel Fernández y concelebrada por los sacerdotes de la Diócesis.
La tarea del Comité Operativo de Emergencias de La Esperanza concluyó ayer tras sofocarse el fuego en el ingenio.
"En este momento de tanta tristeza para la gente de este hermoso pueblo de La Esperanza, los creyentes y todos los hombres de buena voluntad, nos sentimos movidos a estar cerca y acompañar con nuestra cercanía, con nuestro afecto, a aquellos que más sufren por la pérdida de un ser querido.
Rogamos a todos, que dentro de nuestras posibilidades, sepamos brindar un testimonio de mucha solidaridad, cercanía y fraternidad, acompañando, en éste momento, a los que más necesitan éste consuelo y esperanza que nos da a nosotros la fe", dijo monseñor Fernández en una sentida homilía.
Luego de la bendición, toda la feligresía, junto al obispo y los sacerdotes, participaron de una procesión que recorrió las calles de la localidad azucarera llevando en andas la imagen del santo patrono. La misma se detuvo, en un sector de la plazoleta Trapiche, que estaba totalmente vallada, y se rezó un responso por los trabajadores fallecidos.