Paula Chaves llega a Telefe para conducir "Bake Off Argentina, El Gran Pastelero", la versión local de un exitoso reality gastronómico inglés que se estrenará hoy a las 22.30 con un jurado integrado por el chef francés Christophe Krywonis, quien ya participó en otras apuestas culinarias del canal como "Dueños de la cocina" y dos referentes de la pastelería argentina, Damián Betular y Pamela Villar.
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Paula Chaves llega a Telefe para conducir "Bake Off Argentina, El Gran Pastelero", la versión local de un exitoso reality gastronómico inglés que se estrenará hoy a las 22.30 con un jurado integrado por el chef francés Christophe Krywonis, quien ya participó en otras apuestas culinarias del canal como "Dueños de la cocina" y dos referentes de la pastelería argentina, Damián Betular y Pamela Villar.
El programa impone un giro en la carrera de la modelo y conductora, motivado por su alejamiento de la factoría de Marcelo Tinelli, cuna de su popularidad.
Chaves comenzó su carrera a los 18 años cuando fue una de las finalistas del programa "Súper M", un concurso de modelos emitido por El Trece, canal en el que trabajó durante los últimos ocho años.
Su figura se asocia en el imaginario televisivo a la productora Ideas del Sur y los taquilleros envíos "Showmatch" y la diversas ediciones del show "Bailando...", donde comenzó su romance con su actual marido Peter Alfonso por aquel entonces uno de los productores de Tinelli, hoy actor y hacedor de sus propios espectáculos.
Por eso su debut en el certamen para elegir al mejor repostero entre 12 participantes por un premio de 500.000 pesos le genera "ansiedad, ya que marca el cierre de un ciclo en mi vida, y al mismo tiempo me da la posibilidad de hacer un formato relajado, sin meterme con la intimidad de la gente".
- ¿"Bake off" supone un tipo distinto de conducción?
-Paula Chaves: Sí. Los pasteleros, sus historias de vida y los desafíos que deben llevar adelante son los protagonistas del ciclo. Sé cómo correrme del centro de la escena, no me la creo. La pasamos muy bien grabando este programa, nos divertimos dentro de un clima relajado y eso después se traduce a la pantalla.
-¿Cómo la pasabas en "Este es el show" (lo condujo desde 2014 hasta 2017 junto a Listorti)?
-P. CH.: Bien, pero fueron varios años y...Tenía tantas ganas de hacer algo distinto! Acá me recibieron con cariño y son muy tranquilos para trabajar. La oferta me había llegado hace un tiempo: me permite salir del ciclo en vivo y diario donde hablábamos de la vida privada de los demás. Mi tiempo ya había llegado a su fin y cuando tuve la posibilidad de elegir, la tomÚ.
- ¿Costó irse de la productora Ideas del Sur?
-P.CH.: Sí, porque fueron muchos años, como una vida pasada allá. Tuve una charla melancólica de despedida con los productores: el "Chato" (Prada) y Fede (Hoppe), que incluyó llanto; pero a nivel programa y cómo está la situación económica allá fueron dos factores que me ayudaron a tomar la decisión: aún nos deben sueldos, algo que a mí no me preocupa tanto porque tengo ahorros, pero están mis compañeros, los productores que no llegan a pagar el alquiler de sus departamentos, algo sumamente angustiante.
-¿Cómo te llegó la propuesta?
-P.CH.: Ni bien me lo propusieron pensé: "¿Un reality de cocina pastelera en el prime time de Telefe?", pero cuando le conté a mis amigos, muchos me contaron que lo veían, eran sus seguidores y entonces aparecieron quienes era fans de sus distintas versiones: Reino Unido, Italia. A partir de entonces obviamente vi todas.
- ¿Te condiciona que el formato del programa sea un Éxito en el mundo?
-P.C.: Me genera ansiedad, cierta presión, pero jamás pienso en el rating. Quiero hacer un programa que esté lindo y la pasemos bien. Cuando lo lográs, el resultado es bueno, más allá de lo que pase (o no) con los números a la hora de las mediciones.
-¿Qué relación tiene con la cocina?
-P.CH.: Me encanta. Si puedo, cocino, claro que no al estilo de los participantes que son unos genios. Si no puedo preparar la comida, me ocupo de producirla: hago las compras de todos los ingredientes necesarios para elaborar tal o cual plato y le digo a la chica que trabaja en casa que lo prepare mientras, por ejemplo, yo baño a los chicos.
-¿Su buena relación con la cocina viene desde su infancia?
-P.CH.: Sí. En mi casa siempre se cocinó muy sano. Mi mamá, luego de algunos años estudió, se recibió de chef y no tocó más la cocina. No se si fue debido a lo que dice el refrán: "en casa de herrero, cuchillo de palo".
